Cataluña

Borràs y el separatismo radical desafían al Govern y cortan la Meridiana de Barcelona

La presidenta del Parlament participa en la concentración a pesar de la prohibición de la Generalitat

El separatismo radical ha desafiado la orden de la Generalitat y ha vuelto a cortar la avenida Meridana de Barcelona, uno de los principales accesos a la ciudad. Entre los presentes, ha estado Laura Borrás, muy señalada en los últimos días por su papel de obediencia a la Junta Electoral Central y retirada del escaño a Pau Juvillà. Su participación es significativa porque está formando parte de una concentración ilegal y un desafío al Govern.

Varias decenas de personas han cortado la avenida Meridiana. Blindados por los Mossos d’Esquadra para evitar incidentes, han obligado a desviar el tráfico. La consellería de Interior había denegado desde hoy manifestaciones en la Meridiana y había ordenado que se redirigieran a la calle perpendicular, Fabra i Puig, para compatibilizar el derecho a la manifestación y el derecho a la circulación.

Sin embargo, el separatismo radical ya anunció que desobedecería y volvería a cortar el tráfico. Y así ha respondido el primer día de prohibición decretado por la Generalitat: manifestación y corte de la Meridiana. También es cierto que los sábados es probablemente el día que menor tráfico tiene esta vía, muy transitada entre semana porque es muy usada por quien viene a trabajar a Barcelona o sale a trabajar de la ciudad.

No obstante, la concentración, pese a ser ilegal, se ha desarrollado sin ningún incidente porque el propio perfil de los manifestantes tampoco invita a episodios de tensión ni altercados. Ha predominado la gente mayor y los Mossos d’Esquadra actuaron con prudencia y evitaron intervenir en todo momento.

También decir que las protestas han dejado de tener prácticamente como objetivo de los ataques al Estado y se han concentrado en el Govern, con peticiones de dimisión a Pere Aragonès. Borràs ha tratado de darse un baño de masas y ha sido recibida con afecto, un gesto que buscaba ya que en los últimos días ha sido señalada por acatar la orden de la JEC y retirar el acta de diputado al parlamentario de la CUP, Pau Juvillà.

A nivel político, la presencia de Borràs se convierte en un nuevo episodio polémica en la enturbiada relación entre Esquerra y JxCat. La presidenta del Parlament ha desafiado una orden del Govern, decretada por la conselleria de Interior, que está en manos de los republicanos.

Lo cierto, en todo caso, es que Borràs ha medido las consecuencias de sus actos y ha valorado más oportuno desobedecer al Govern, que no parece que pueda tener efectos jurídicos sobre su figura, mientras que desobedecer al Estado, sí.

La reacción del constitucionalismo no se ha hecho esperar. “Cortar la Meridiana es la clásica acción “procesista”: amarga el día a miles de catalanes de todas las ideologías y no le hace ni cosquillas a la unidad de España. Luego actúa la justicia y vienen los lamentos...”, ha afirmado el líder del PP, Alejandro Fernández.

El diputado del grupo parlamentario de PSC-Units per Avançar, Ramon Espadaler, ha criticado el “triste ejercicio de populismo” de Borràs, mientras que el líder de Ciudadanos en Cataluña, Carlos Carrizosa, ha pedido la dimisión de la presidenta del Parlament.