Junqueras defiende el diálogo y carga con dureza contra Junts por la lengua: buscan “conflictividad”

Oriol Junqueras ha sido claro y diáfano un día después de la ruptura entre Esquerra y Junts por la lengua: “Lamentamos que por razones partidistas y porque alguien crea que les conviene la conflictividad, se desdigan de aquello que han pactado y firmado”. Así ha respondido a la pregunta directa sobre la negativa de los posconvergentes a apoyar y aprobar el pacto del catalán con ERC, PSC y Comunes -que siguen contando con mayoría- para dar respuesta a la sentencia del 25% de castellano

El partido de Puigdemont se ha desmarcado definitivamente de la reforma de la ley en el Parlament que los republicanos presentaron como aval ante el tribunal y que quieren usar para defender la inmersión y sortear el bilingüismo abriendo un cisma de importantes magnitudes en el Parlament y el Govern.

Ni el catalán une ya al independentismo, una situación que Junqueras ha criticado. En una conferencia durante un desayuno-coloquio organizado por Nueva Economía Fórum, el presidente de Esquerra ha reclamado “generosidad, responsabilidad y sentido de país” a Junts para recular y volver al acuerdo.

El republicano no se ha referido en ningún momento a la propuesta que los posconvergentes enviarán al Govern en los próximos días “sobre cómo actuar para proteger el catalán”. Su intención pasa por una reforma de la ley de educación vía decreto que blinde el catalán como lengua vehicular y siga marginando el castellano en las aulas, aunque aún se desconoce el fondo y el posicionamiento concreto. En este sentido, Junqueras se ha limitado a pedir a Junts volver a lo pactado y a criticar su desplante final.

De hecho, el partido de Aragonès tiene ahora dos caminos por delante: o seguir con el pacto y aprobarlo en la cámara con los dos partidos que conforman el Gobierno (PSC y Podemos); o bien romper la baraja y aliarse con el independentismo (Junts y la CUP).

La reforma de la Ley de Política Lingüística de 1998 ideada para esquivar la sentencia del 25% flexibiliza la inmersión en función de la realidad sociolingüística de cada centro y otorga al español categoría de lengua de “aprendizaje” pese a seguir blindando el catalán sin fijar porcentajes de uso como ordena la justicia. “Las lenguas no pueden ser nunca una cuestión de porcentajes” porque éstos “no se adaptan a la realidad, que siempre es mucho más compleja que cualquier porcentaje concreto”, ha avisado sobre la sentencia del 25%, sin entrar más en detalles ni avanzar qué hará finalmente el Govern.

Defensa de la negociación

Sobre la vía del diálogo, Junqueras se ha esmerado en defender la negociación como “instrumento político útil para resolver conflictos políticos”, si bien “otra cosa es cómo se concreta esa idea en mesas de negociación concretas”.

Las garantías de éxito de la mesa actual Estado-Generalitat dependen, ha explicado, “de la buena voluntad, la sinceridad, la ‘razonabilidad’ y el esfuerzo de cada una de las partes”, pero ha lamentado que “desgraciadamente todos constatamos que la contraparte (del Gobierno) tiende a arrastrar los pies y a tener un interés escaso o, al menos, claramente insuficiente”.

Responsabilidades “proporcionales”

Sobre el caso Pegasus, Oriol Junqueras ha exigido al Gobierno de Pedro Sánchez, si quiere “restaurar la confianza dañada” con su partido, que empiece a ser transparente, asuma responsabilidades “proporcionales” al resultado de la misma y ofrezca garantías de que el espionaje no se repetirá. En concreto y en la línea más templada mantenida estos días -sin mencionar a nadie en concreto- ha reclamado aclarar los detalles de las escuchas, quién lo ordenó y cuánto tiempo duró.