Junts

El TSJC abre juicio oral contra Laura Borràs por corrupción

La presidenta del Parlament se sentará en el banquillo de los acusados por prevaricación y falsedad documental, y su carrera política se ve abocada al abismo

Laura Borràs se sentará en el banquillo de los acusados por corrupción. El Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha abierto juicio oral contra la presidenta del Parlament y lideresa de Junts por presuntamente fraccionar contratos a dedo para favorecer a un amigo cuando dirigía la Institució de les Lletres Catalanes (ILC), entre 2013 y 2017.

Una vez dictada esta resolución el siguiente trámite es dar traslado a las defensas para que presenten sus escritos. Recibida toda la documentación, el tribunal fijará la fecha del juicio, previsiblemente ya en septiembre ya que agosto no es un mes hábil.

En un auto, el tribunal ha dictado la apertura de juicio por presunta prevaricación y falsedad documental. En la causa, la Fiscalía ha reclamado para Laura Borràs una pena de seis años de cárcel y 21 de inhabilitación, además de una multa de 144.000 euros, por estos dos delitos asociados a la corrupción. También se sentarán en el banquillo su amigo Isaías H. -que supuestamente se favoreció de los contratos- y a Andreu P., que presuntamente lo ayudó a preparar los presupuestos y facturas que presentaba a la ILC, la entidad cultural pública dependiente de la Generalitat.

Esta novedad en el caso Borràs puede implicar un tsunami político de consecuencias difíciles de prever. El artículo 25.4 del Parlament indica que la Mesa debe “acordar la suspensión de los derechos y deberes de los parlamentarios de forma inmediata” cuando se decrete apertura de juicio oral -justo ahora- y en caso los delitos asociados a la corrupción como los que se le imputan a Borràs. Es decir, la carrera política de la posconvergente se ve directamente abocada al abismo.

La propia dirigente maniobró hace unos meses para modificar este punto y se topó con el rechazo de todos los partidos, incluso de ERC y la CUP.

Este mismo lunes, Esquerra le volvió a exigir que dé “un paso al lado” y se aparte de la presidencia de la cámara para “preservar” y “defender” la institución. Los republicanos incluso se han prestado a llegar a un hipotético acuerdo para que las funciones de Borràs puedan quedar en manos de otro representante de Junts mientras no se resuelve el caso en los tribunales.

De ser suspendida por la Mesa en aplicación del reglamento –hay dos vías: la directa y la que requiere el aval de la comisión del estatuto del diputado– sus funciones las debería asumir la vicepresidencia, en este caso Alba Vergés de Esquerra. Sin embargo, los republicanos contemplan llegar a un acuerdo con los posconvergentes si se diera el caso para pactar su recambio.