El verano nos obliga buscar algún rincón en el que poder hacer frente al calor. Olviden los centros comerciales u otros espacios con ínfulas para soportar las altas temperaturas. Una buena solución es encerrarse en un cine y si lo hacen en el de la Filmoteca de Catalunya, en Barcelona, también tienen la oportunidad de disfrutar en la gran pantalla de clásicos. Es aquí donde este mes de junio se podrá conocer la labor detrás de la cámara de uno de los grandes nombres del séptimo arte como es Paul Newman.

Con motivo de la conmemoración del centenario de Newman, la Filmoteca ha querido fijarse en su faceta como realizador. Para ello ha programado un ciclo en el que se nos presenta a un Paul Newman interesado por buscar nuevos lenguajes y formas de expresión, un camino que inició cuando estudió dirección escénica en la Universidad de Yale rodando algunos cortometrajes. Pero cuando debutó en la dirección de largometrajes, lo hizo pensando en su esposa, la actriz Joanne Woodward, a quien apenas le llegaban proyectos tras haberse retirado unos años mientras criaba a las tres hijas que tenían en común.

En “Rachel, Rachel” encontramos a Woodward, de la mano de Newman, en un papel profundamente emocional e introspectivo, y con el que la actriz reflejaba las inquietudes de muchas mujeres de la época que habían pospuesto sus ambiciones personales para asumir papeles familiares, algo que estaba muy cerca de la realidad de la intérprete. La cinta tuvo un importante éxito y confirmó que nos encontrábamos ante un autor a tener en cuenta, algo que queda evidente en las otras cinco películas en las que asumió la dirección, todas ellas con puntos en común como una estrecha relación con su vida privada, un estilo sobrio centrado en las emociones contenidas y el protagonismo femenino.

En la Filmoteca de Catalunya, durante el mes de junio, se proyectarán títulos como “El zoo de cristal”, su adaptación de la obra teatral clásica de Tennessee Williams, con John Malkovich, Karen Allen y Joanne Woodward, como protagonistas. Esta última también encabezó el reparto de “Los efectos de los rayos gamma sobre las margaritas”, que le valió el premio a la mejor actriz en Cannes. Probablemente el título más personal de Paul Newman como realizador sea “Harry e hijo”, rodado en memoria de su hijo Scott, fallecido por una sobredosis, y donde combina con habilidad sentimientos cómicos y dramáticos inspirados en su propia biografía.