El panorama político en Ripoll se ha visto sacudido ante la posibilidad de que ERC y Junts faciliten la aprobación del presupuesto de Aliança Catalana, la extrema derecha catalan que gobierna en minoría en el municipio. En el ejercicio anterior, las cuentas fueron prorrogadas debido al cordón sanitario impuesto por ambas formaciones. Aunque los grupos municipales republicanos y juntaires han mostrado disposición a negociar, la dirección nacional de ERC, liderada por Oriol Junqueras, ha asegurado que no permitirá que se aprueben los presupuestos.

Se prevé que la líder de AC, Sílvia Orriols, se reuna esta semana con ambos grupos municipales. La sesión plenaria en la que debía debatirse el presupuesto estaba programada para el 23 de diciembre, pero la alcaldesa retiró el punto del orden del día en el último momento al no contar con ningún apoyo confirmado. En 2023, ya se vio obligada a prorrogar el presupuesto por la falta de respaldo de la oposición y ahora busca, al menos, la abstención de los seis concejales de Junts y ERC para poder aprobar las cuentas de 2025.

Fuentes del grupo municipal de ERC han señalado que plantearán una serie de condiciones en la negociación, como la creación de educadores de calle, la apertura de un nuevo centro cívico y medidas para fomentar la integración, como la puesta en marcha de una oficina de escolarización municipal para familias recién llegadas, tal y como indica el diario Nació. Según estas mismas fuentes, solo se abstendrán si Aliança Catalana acepta estas propuestas. Sin embargo, la dirección encabezada por Junqueras niega cualquier posibilidad de abstención que facilite la aprobación del presupuesto. En este sentido, si algún concejal republicano llegara a facilitarlo, podría enfrentarse a una expulsión del partido. No sería un hecho sin precedentes: a principios de 2024, ERC ya expulsó a tres concejales de Ribera d'Ondara por pactar con Aliança Catalana.

Por su parte, Junts también tiene previsto reunirse esta semana con Orriols. Desde su grupo municipal, han mostrado disposición a negociar si se aceptan propuestas como una apuesta firme por la cultura, el aumento de ingresos municipales o el impulso de los educadores de calle. A diferencia de ERC, la dirección nacional de Junts no descarta un posible acuerdo, aunque matizan que, por ahora, el encuentro se limita a "escuchar" lo que plantee Aliança Catalana y que no existe ninguna negociación en curso.

En cualquier caso, la última votación en el pleno del Ayuntamiento de Ripoll fue sobre las ordenanzas fiscales, que salieron adelante con el apoyo de Aliança Catalana y Junts. En cambio, ERC y la CUP votaron en contra, mientras que el PSC y Som-hi (independientes) optaron por la abstención.