La extrema derecha independentista obtiene su primera alcaldía en Cataluña

Vox ya tiene su reverso tenebroso en Cataluña. Al menos en la Cataluña interior heredera del carlismo. Aliança Catalana, liderada por Sílvia Orriols, la misma formación que hace cuatro años se presentó bajo el nombre de FNC y terminó sin afiliación debido a desacuerdos con el partido, ha logrado un cambio de ciclo en Ripoll al ganar las elecciones municipales contra todo pronóstico.

Durante la campaña de 2019, los partidos con representación, a propuesta de la CUP, acordaron establecer un cordón sanitario al FNC debido a su "ideología xenófoba". La ciudad estaba conmocionada por los atentados de Barcelona, gestados en Ripoll, y se temía que esto avivara discursos de odio. Durante su mandato, el FNC no obtuvo apoyo de los demás partidos y mantuvo posturas muy agresivas con la inmigración. Sin embargo, anoche logró posicionarse como la fuerza más votada, desbancando a Junts.

Con una participación cercana al 60%, ocho puntos menos que hace cuatro años, Orriols ha conseguido más del 30% de los votos, a una gran distancia de Junts, la segunda fuerza más votada, con 3 concejales y un 17% de los votos. Junts, que había gobernado sin problemas durante 12 años en la capital, obteniendo mayoría absoluta en 2015 y una cómoda minoría en 2019, ha perdido esta noche 5 concejales y se ha quedado con solo 3. En términos de votos totales, se ha quedado muy cerca de ERC, con una diferencia de tan solo 26 votos.

El mandato de Munell

Durante este mandato de Junts, marcado por la pandemia, se destacaron medidas para revitalizar el casco antiguo, según la ACN, como ayudas para la rehabilitación de viviendas y la creación de una bolsa de locales vacíos. En colaboración con el Consorcio de Bienestar Social del Ripollès, se implementó un nuevo plan de convivencia, un proyecto integral para sanar las heridas causadas por los jóvenes radicalizados de Ripoll en los atentados del 17A, que dejaron a la comarca en estado de shock.

En estos cuatro años, el equipo de Munell llevó a cabo el controvertido cambio de nombre del barrio de Fuensanta, de connotaciones franquistas, por el de calle Ferroviaris, tras una votación vecinal. Además, se encontró con obstáculos internos por parte de los promotores que retrasaron el proyecto del futuro Bike Park, el cual también enfrentó oposición de ecologistas y Alternativa por Ripoll-CUP.

La expulsión del teniente de alcalde Joaquim Colomer hace unos meses, por falta de confianza y acusaciones de deslealtad en las redes sociales a través de cuentas falsas, ensombreció el final del mandato. Colomer, actual presidente del Consell Comarcal, se ha convertido en un nuevo actor político bajo la nueva marca de Som-hi Ripoll-Independents pel Ripollès. Estas elecciones han servido para medir el apoyo de los votantes que puede movilizar sin el respaldo de Junts. Colomer ha sido elegido como único representante de la formación.

Un total de seis listas se disputaron los 17 concejales del Ayuntamiento de Ripoll, y todas ellas han logrado obtener representación. La mayoría se establece en 9 concejales.