Arte y Salud

Puertas artísticas para mejorar el bienestar emocional del paciente oncológico adolescente

Vall d'Hebron y el MNAC están llevando a cabo un proyecto que explora la capacidad terapéutica del arte, en el cual participan 12 chicos de entre 12 y 17 años de edad que acaban de superar un cáncer

Jorge, que acaba de superar un cáncer de hígado, crea su propia puerta en el marco del programa 'Abrimos puertas'
Jorge, que acaba de superar un cáncer de hígado, crea su propia puerta en el marco del programa 'Abrimos puertas'Vall d'Hebron

Las enfermedades oncológicas, más allá de ser un problema de salud grave, impactan de una manera muy significativa en la vida y el bienestar emocional de los pacientes, especialmente cuando éstos se encuentran en la adolescencia, una etapa de muchos cambios para el individuo, que ya de por suele venir acompañada de una crisis vital y en la que el menor necesita sentirse parte del grupo de iguales.

En este contexto vital, el cáncer muchas veces potencia la sensación de aislamiento, puesto que el paciente debe ausentarse de la escuela durante largas temporadas y los efectos secundarios del tratamiento le impiden relacionarse con normalidad con el entorno, así como también suele dinamitar la autoestima y autoimagen de estos chicos, que frecuentemente sufren cambios físicos debido a la propia enfermedad o el tratamiento. En definitiva, como indica Anna Saló, psicooncóloga del hospital Vall d'Hebron, "la enfermedad puede afectar muy negativamente al bienestar de los pacientes adolescentes, aumentando las dificultades propias de esta etapa vital", por ello es importante ofrecerles un acompañamiento emocional, no solo durante el proceso terapéutico, sino también a su conclusión.

Sin embargo, los centros a veces no tienen capacidad para dar respuesta a estas necesidades, sobre todo una vez el paciente ya se encuentra en la recta final del tratamiento o ya lo ha concluido e inicia la reincorporación a su vida ordinaria. Es entonces cuando el arte puede jugar un papel destacado como estrategia terapéutica en lo relativo al ámbito emocional.

Existe una corriente a nivel mundial que aboga y explora el potencial de las artes en el contexto sanitario, la cual se vio refrendada cuando en 2019 la Organización Mundial de la Salud, tras revisar más de 900 estudios en los que se aseguraba que el arte beneficia a la salud, animó a los gobiernos a incorporarlo en los sistemas sanitarios.

En esta línea, ese mismo año, el Museo Nacional de Arte de Catalaluña (MNAC) y el Instituto Catalán de Salud (ICS) firmaron un convenio con el Hospital de la Vall d'Hebron para explorar el potencial del arte como herramienta terapéutica en el marco del programa 'Artes en Salud', bajo cuyo paraguas se está desarrollando a día de hoy el tercer proyecto de colaboración entre estas entidades, que se concreta en el programa 'Abriendo puertas', cuyo objetivo principal es el de favorecer el bienestar emocional de una docena de pacientes oncológicos del hospital de entre 12 y 17 años de edad que se encuentran en tratamiento de baja intensidad, en mantenimiento o fuera de tratamiento. Ésta es la tercera intervención que se lleva a cabo en el marco de 'Artes en Salud', el cual se financia con los 140 mil euros recaudados en la subasta en Christie´s de las botas con las que el futbolista Leo Messi marcó el gol que le permitió convertirse en el máximo goleador de la historia

Las puertas como temática principal

Acerca de esta iniciativa, Guillem d 'Efak Fullana, jefe de acción comunitaria y programas público del MNAC, señala que "no se trata solo del poner el arte y la salud uno junto al otro, sino que consiste en el diseño de una intervención robusta que genere evidencia, la cual se ha de definir por cinco puntos claves para resultar eficaz: debe tener un objetivo de salud claro, que en este caso se concreta en paliar los problemas de ansiedad, depresión, trastorno por estrés postraumático, autoestima, angustia... que pueden estar afrontando estos chicos; ha de estar cocreada por un agente del ámbito de la salud, como es Vall d'Hebron, y uno del cultural, como el MNAC para sumar expertise y crear un grupo de trabajo multidisciplinar; debe someterse a un proceso de evaluación riguroso, puesto que queremos generar evidencia, razón por la cual este proyecto va asociado a un estudio de investigación; así como se han de publicar los resultados del mismo y los participantes en esta intervención tienen que ser consultados durante el diseño de la misma".

En esta línea, la intervención se concreta en nueve sesiones, que tienen lugar cada martes por la tarde, de 17.30 a 20 horas, en el MNAC, a las que acuden estos doce pacientes seleccionados por el hospital para participar en la misma. La idea, como indica Guillem d'Efak, es "usar los activos que tiene el museo, un espacio tranquilo, no hospitalario y con obras de arte, para conseguir los objetivos marcados" y se ha optado por la temática de las puertas como centro en torno al cual gira la intervención. El jefe de acción comunitaria del museo justifica esta decisión al señalar que "las puertas representan esa momento de tránsito que están viviendo los chicos, cuando dejan una situación para entrar en otra, y a la vez éstas se puede usar para muchas cosas, como salir o entrar, para airear un espacio o lograr privacidad...y tienen mucha simbología".

Reflexión y acción

Así pues, en las primeras sesiones, los adolescentes elucubraron acerca del sentido de las puertas que aparecen en diferentes obras expuestas en el MNAC y para ello se recurrió a un recurso de mediación artística que se conoce como Estrategias del Pensamiento Visual. "Se trata de ponerse delante de la obra y entonces la mediadora pregunta qué ves, que crees que el artista quiere representar y cómo interpretas el conjunto, situando así el foco no en el objeto sino en el sujeto", explica Guillem d'Efak, y de esta manera "los chicos comparten sus visiones y el grupo reflexiona acerca de ello". Durante estas sesiones, los participantes se relacionan e interactúan entre ellos, a la vez que exploran sus sentimientos.

A partir de la quinta sesión, los chicos, de forma individual o grupal, crean su propia propuesta artística a partir de su intervención sobre una puerta. "Pueden hacer lo que quieran, como cortarla, pintarla, engancharle cosas...y para ello cuentan con el apoyo del equipo de infraestructuras del museo, comenta el jefe de acciones comunitarias del MNAC.

Estas creaciones que están elaborando los adolescentes, a quienes les quedan solo dos sesiones más de trabajo, son una oportunidad para que éstos expresen y comuniquen sus emociones más íntimas y, finalmente, se expondrán a partir del 17 de febrero, momento en el que los padres, quienes paralelamente participan en las sesiones de 'Tardes de Arte', unas tertulias de arte dinamizadas por una educadora en las que pueden disfrutar de un espacio de pausa donde compartir experiencias, podrán ver lo qué han hecho los chicos.

Jorge reflexiona sobre la seguridad

Jorge, por ejemplo, ha decidido intervenir artísticamente en su puerta a partir de lo que a él le sugiere la palabra seguridad , ya que, tras haber superado un cáncer de hígado con solo 13 años, este objeto le transmite seguridad. Por su parte, su padre, Alex, está expectante y con ganas de ver el trabajo del chico. "Estoy muy feliz de que mi hijo participe en esta iniciativa. Verle pensando en él mismo, preocupándose por él después de haber pasado un año tan complicado, expresándose y relacionándose con chicos que han vivido lo mismo que él me da felicidad. Es una experiencia que deberían tener todos los niños que han pasado por esta enfermedad", confiesa para continuación recordar que "Jorge se ha perdido muchas cosas por culpa del cáncer". "De hecho, cuando se lo diagnosticaron se tenía que ir de colonias con los amigos y no pudo, fue duro", comenta Álex, quien además admite que, a nivel personal, el haber participado en las sesiones de 'Tardes de Arte' le "ha despertado el interés por los museos y el arte".

Pero el plan de acción que contempla 'Abriendo Puertas' no concluirá el próximo 17 de febrero, cuando se expondrán las puertas creadas por los adolescentes. Y es que este proyecto incluye también el desarrollo de un estudio, en el que se evaluarán los resultados de esta intervención para aportar evidencia acerca del efecto y los beneficios de las intervenciones artísticas en el ámbito de la salud, con el fin de poder planificar y describir otras futuras. Así pues, como explica la psicooncóloga de Vall d'Hebron e investigadora principal del proyecto, Anna Saló, "se va a realizar una evaluación pre y post intervención a partir de un cuestionario Sena que deben responder los participantes para conocer qué recursos personales tienen, su nivel de autoestima y de relaciones sociales y, con estos datos, llevaremos a cabo un análisis estadístico". "Paralelamente, los pacientes tendrán que hacer un cuestionario cualitativo que hemos diseñado específicamente para este estudio acerca de cómo se han sentido durante la intervención y de qué les ha servido", concluye.