Vall d'Hebron implementa la tecnología 3D para ampliar las indicaciones de la cirugía robótica en pacientes con tumores en el paladar blando

El equipo de Otorrinolaringología y Cirugía de Cabeza y Cuello de la Vall d'Hebron ha recurrido por primera vez al uso de la tecnología 3D para la planificación de una cirugía robótica de tumor en la parte blanda del paladar gracias a la cual Susana, una paciente de 55 años con una alteración vascular que complicaba la intervención y, por lo tanto, exigía llevar a cabo una cirugía abierta por la complejidad de la misma, ha podido beneficiarse de esta técnica mínimamente invasiva, que permite acceder al tumor por la boca sin necesidad de hacer una incisión en el cuello.

En torno a 7.600 personas son diagnosticadas al año en España de cáncer de cabeza y cuello, el noveno tumor más prevalente, cuya incidencia va en aumento debido al tabaquismo y al virus del papiloma. En los casos de pacientes con un tumor en el espacio parafaríngeo, es decir localizado en la zona blanda del paladar, la técnica convencional para resecar el tumor era hasta hará unos tres años una cirugía abierta, en la que se lleva a cabo un corte en el cuello, desde el que se accede al tumor para extirpar el tejido.

Se trata de una intervención muy delicada, que requiere mucha precisión puesto que, a pocos centímetros, hay estructuras sensibles, tanto a nivel estético como funcional, de manera que un cirugía de estas características podría afectar a la deglución, el habla y la respiración del paciente.

Ante esta realidad, el doctor David Virós, jefe del Servicio de Otorrinolaringología y Cirujano de Cabeza y Cuello de Vall d’Hebron, introdujo el uso de la cirugía robótica para intervenir a este tipo de paciente, la cual ofrece una mayor seguridad y acorta el tiempo tanto quirúrgico como de recuperación.

El robot Da Vinci, parte de la solución

Y es que este procedimiento permite hacer incisiones mínimas y, puesto que los brazos del robot miden apenas 8 milímetros, posibilita el trabajar con precisión en espacios reducidos y zonas complejas como es el paladar blando, con movimientos para los que el brazo humano no está capacitado, eliminando además el temblor y la fatiga que puede experimentar el cirujano durante la intervención.

En cualquier caso, en quirófano, el robot Da Vinci requiere de la intervención humana, puesto que sus brazos únicamente replican los movimientos que la mano del cirujano realiza desde la consola, la cual está ubicada fuera del campo quirúrgico y desde la que éste manipula virtualmente el instrumental quirúrgico. Además, ésta proporciona al profesional una visión del interior del paciente en tres dimensiones y con un aumento de la realidad de hasta diez veces gracias a la cámara instalada en uno de los brazos del robot.

En definitiva, mediante el uso de esta técnica en cirugías para extirpar tumores en el espacio parafaríngeos se minimiza el riesgo de complicaciones y se evita la traqueostomía, además de acortar el tiempo de quirófano de las 4 a las 2 horas, así como también se reduce el dolor postoperatorio, se agiliza la recuperación del paciente y es posible preservar mejor sus funciones vitales como el habla o la deglución, sin olvidar que, gracias a que se trata de una cirugía mínimamente invasiva, estéticamente no deja cicatrices.

La tecnología 3D para confirmar y planificar

Sin embargo, hay un grupo de pacientes que no pueden beneficiarse de la cirugía robótica, porque a la complejidad de la intervención se unen complicaciones propias de su anatomía y, en estos casos, la única opción es llevar a cabo una operación abierta, con incisión en el cuello. Éste era, a priori, el caso de Susana, quien debido a un bucle en su arteria carótida, no era apta para una cirugía robótica.

Sin embargo, el doctor Virós vio en la tecnología 3D una herramienta útil y eficaz para ampliar las indicaciones de la técnica mínimamente invasiva en pacientes con tumor en el paladar blando y, junto a los profesionales expertos en imagen médica y en ingeniería biomédica de Tencologías 3D+ de Vall d'Hebron, desarrolló las herramientas necesarias para poder planificar y entrenar la intervención antes de operar al paciente. "Gracias a la recreación del tumor en 3D podemos realizar la intervención previamente tantas veces como queramos, mirando dónde podemos tener problemas y de qué manera debemos movilizar las estructuras que rodean al tumor para así, el día de la cirugía, no tener complicaciones".

Al respecto recuerda que "este tumor en la zona blanda del paladar está situado en la base del cráneo, al lado de los vasos sanguíneos y nervios conectados al cerebro. Además, la estructura no es sólida, sino elástica, por lo que necesitábamos conocer la zona al detalle para valorar el abanico de opciones que se abren a cada paso de la intervención".

De hecho, tal y como señala Albert Salazar, gerente del Hospital Vall d'Hebron, con la planificación virtual y la utilización de la tecnología de impresión 3D de elementos de la paciente "estamos haciendo medicina personalizada, porque se trata de un tratamiento individualizado".

Hacia una práctica rutinaria

Por ahora, Susana, quien 11 días después de la intervención dice sentirse muy bien y estar muy contenta, ha sido la primera paciente que se ha podido beneficiar de esa combinación entre la cirugía robótica y la planificación 3D para tratar su tumor en el espacio parafaríngeo, pero ante los buenos resultados de la implantación de la tecnología 3D en este ámbito de la práctica clínica, que ha sido posible gracias al trabajo multidisciplinar de los profesionales de Vall d'Hebron, "la estrategia es implementar en otros hospitales esta manera de hacer, que podría ser rutinaria", explica el conseller de Salud, Manel Balcells.

Al respecto, recuerda que a día de hoy ya "hay cuatro hospitales catalanes acreditados para hacer laboratorio de tecnología 3D" y además avanza que "la Comisión Europea ha otorgado a Cataluña, concretamente a Vall d'Hebron como hospital de referencia, 12 millones de euros para desarrollar la aplicación de la tecnología 3D y la Inteligencia Artificial para patologías congénitas".