El Gobierno valenciano abre diligencias por 62 posibles vacunaciones irregulares, 10 de ellas a cargos públicos

La consellera de Sanidad, Ana Barceló, ha informado hoy de que su Departamento ha detectado un total de 233 posibles vacunaciones irregulares, de las cuales 171 finalmente se han considerado «justificadas» mientras que las otras 62 se siguen investigando y se han trasladado al Departamento de Salud Pública para que se determinen los hechos y se depuren posibles responsabilidades.

De estos 62 casos, 10 de ellos corresponden a altos cargos, concretamente nueve alcaldes y el Fiscal de Castellón, José Luis Cuesta, que fue apartado de su cargo tras conocerse estos hechos.

En este caso además el Hospital General de Castellón investiga posible relación entre la vacunación del entonces fiscal y la desaparición de un vial con seis dosis de la vacuna de este centro hospitalario, en el que trabaja la mujer del exfiscal.

Los otros nueve cargos investigados son: los alcaldes de El Verger y Els Poblets (que son marido y mujer); una concejala de Dénia; el alcalde de Villahermosa del Río; el alcalde de Rafelbunyol; el primer edil de La Nucía y diputado provincial; el concejal de Sanidad de Orihuela; un diputado provincial de Alicante y el alcalde de Benlloch.

Del mismo modo, la consellera ha asegurado que se investigará también a todas aquellas residencias en las que se ha vacunado primero al personal no sanitario que a los propios internos, tal y como ha denunciado hoy la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra.

En todos estos casos, la Conselleria investiga la posible implicación del personal de su Departamento en estas vacunaciones que no procedían.

Con respecto a las segundas dosis para estas personas, Barceló ha explicado que se le ha consultado al Comité de Bioética de la Comunitat Valenciana, que ha determinado que reciban la segunda dosis seis semanas después de la primera, en lugar de tres, de manera que se asegure la segunda dosis de las personas que se han vacunado correctamente.

En cuanto a las denuncias por el estado en el que se encuentran los pacientes del antiguo hospital La Fe, la consellera ha explicado que su Conselleria ha abierto una investigación aunque insiste en que su Departamento «no solo no ha recibido ninguna queja sobre este centro» sino que ha recibido «felicitaciones». Ha desmentido que el centro carezca de agua caliente, telefonillos y fisioterapeutas.