No hacer oídos sordos al acoso: el reclamo de las personas con implante cloquear

La Asociación de Implantados Cocleares de la Comunidad Valenciana ha lanzado este viernes la campaña “No hagamos oídos sordos al acoso escolar” a las personas con discapacidad auditiva, con la que pretende fortalecer las estrategias de prevención existentes contra el acoso escolar y articular otras “para ser capaces de atenuar un problema creciente”.

“Las víctimas con implantes cocleares a menudo no saben a quién acudir, y es necesaria otorgar una mayor visibilidad a este tema”, han asegurado desde el colectivo, al tiempo que han señalado que mientras el teléfono accesible para acoso escolar del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte es “ideal” para padres o profesores, no lo es para personas con pérdida auditiva.

El teléfono, 600 909 073, que cuenta con canal de Telegram, es una de las estrategias articuladas contra el acoso escolar, pero la campaña, enmarcada en el Día contra el Acoso Escolar que se celebra el próximo 2 de mayo, pretende concienciar más a la población del problema existente.

Desde el colectivo han explicado que según un estudio europeo realizado por Save The Children en 2016, la tasa de adolescentes españoles que podría estar sufriendo acoso escolar era de un 9,3 por ciento, mientras un 6,9 por ciento podrían recibir ciberacoso.

Asimismo, han subrayado que estudios señalan que las personas con sordera podían estar en mayor riesgo de victimización a causa de barreras sociales vinculadas a la audición, ya que las dificultades comunicativas pueden incluso conducir al hecho de que las víctimas no busquen ayuda en el entorno educativo o familiar.

Al respecto, también han resaltado que existen investigaciones que sostienen que la forma más habitual de acoso hacia este colectivo son las burlas o la exclusión social, frente a las formas más directas como son las agresiones físicas o los insultos, más frecuentes en la población general.

Así, han explicado que en tiempo de crisis económicas y sociales, “la discriminación por ser diferente aumenta y es exacerbada por la necesidad de encontrar culpables en la situación que viven muchas familias dentro del territorio español”.

“La intolerancia encuentra un campo de cultivo y crece sin importar que el mensaje sea cierto o no, especialmente entre grupos vulnerables como los estudiantes implantados cocleares”, han concluido desde la asociación.