Las empresas valencianas exigen una solución «de urgencia» a la crisis con Argelia

El impacto del veto argelino a los productos españoles tendrá un efecto «inmediato» en la economía valenciana. Así lo aseguraron ayer desde la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV), por lo que exigieron «una solución con la máxima urgencia». Desde la patronal valenciana insistieron en que la decisión unilateral de Argelia, «en un contexto de encarecimiento de precios y perturbaciones en las cadenas de producción provocadas por la invasión rusa sobre Ucrania, quebranta la seguridad y confianza en la que se basan las relaciones comerciales internacionales».

Por ello solicitaron la intervención «de las más altas esferas de la diplomacia comercial tanto a nivel nacional como europeo» con el objetivo de alcanzar una solución de manera inmediata.

Desde la organización señalaron que a largo plazo el impacto directo se trasladará al conjunto de la economía española en un más que previsible aumento del precio del gas procedente de Argelia y afectará sobre todo a las ramas más gasintensivas. En cambio, el impacto sobre la economía de la Comunidad será de carácter inmediato dado que, aunque por volumen las relaciones import-export son reducidas, muestran mayor concentración a nivel provincial y sectorial.

A pesar de que las relaciones comerciales con Argelia no equivalen a grandes cantidades, la valenciana es la segunda región que más exporta en el conjunto del país -con el 23 por ciento del total- y las relaciones comerciales están muy concentradas en las provincias de Castellón (segunda provincia de España que más importa a Argelia) y Alicante (tercera provincia). Valencia es la séptima provincia en volumen exportado a Argelia.

Por su parte, el presidente del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, José Vicente Morata, recordó que las operaciones comerciales con Argelia desde la Comunidad venían descendiendo durante los últimos años aunque, subrayó, esto no resto importancia al impacto para el comercio de la región, sobre todo para aquellas empresas exportadoras al país y, más aún, para las 18 compañías valencianas implantadas en Argelia.

En este sentido, Morata solicitó apoyo financiero para todas aquellas empresas que verán bloqueados sus cobros como consecuencia del veto argelino, “al menos hasta que se solucione la situación”, y recordó que es el momento de que la diplomacia española y europea “tomen cartas en el asunto”.

Más de 400 millones en juego

Un total de 1.343 empresas de la Comunidad Valenciana exportaron el año pasado 416,4 millones de euros a Argelia, una cantidad que, si nada lo evita, este año será mucho menor después de que el país africano anunciara el miércoles el fin del Tratado de Amistad con España.

Los sectores más afectados en el apartado de exportaciones son los esmaltes, fritas y pinturas; los productos cerámicos en segundo lugar y las máquinas y aparatos mecánicos, mientras que los principales sectores importadores son los abonos, los productos químicos inorgánicos y los pescados y crustáceos.

Además, un total de 18 empresas valencianas de diferentes sectores se encuentran implantadas en África, por lo que sufrirán un impacto directo en sus cuentas.

La ruptura de relaciones comerciales con Argelia va a tener un impacto negativo también en el sector agropecuario valenciano. La principal consecuencia será el encarecimiento de algunos de los principales costes de producción de los agricultores y ganaderos: la energía, los combustibles y los abonos.

Por su parte, el presidente de la Generalitat valenciana, Ximo Puig, aseguró que no va a haber afección directa a los contratos ya previstos con el gas de Argelia para el sector azulejero castellonense, pero insistió en «acelerar al máximo los procesos hacia la descarbonización».

En otro orden de cosas, el conseller de Economía Sostenible, Rafael Climent, exigió al Gobierno que convoque a las autonomías para explicar con detalle las consecuencias que tendrá esta crisis en todas las regiones.