Tribunales

Uno de los denunciantes de Alquería apunta al ex presidente de la Diputación Jorge Rodríguez como promotor de las contrataciones

Le insultaban y le gritaban cuando ponía reparos

El expresidente de la Diputación de Valencia Jorge Rodríguez
El expresidente de la Diputación de Valencia Jorge RodríguezManuel BruqueAgencia EFE

Uno de los dos denunciantes del caso Alquería y técnico jurídico de Divalterra, José Luis Pellicer, ha apuntado al expresidente de la Diputación de Valencia Jorge Rodríguez como impulsor de los siete contratos de alta dirección que supuestamente se ejecutaron de forma arbitraria y contraria a la legalidad.

En su declaración de este lunes, en calidad de testigo ante el tribunal que juzga este caso, Pellicer ha asegurado que le dijeron que fue el actual alcalde de Ontinyent el que dio los nombres de quiénes debían ocupar esos cargos y que él advirtió de la irregularidad del proceso.

Pellicer trabajaba en Imelsa (el antiguo nombre con el que operaba Divalterra) y en 2015, tras el cambio de gobierno en la Diputación, fue nombrado secretario del consejo de administración de esta empresa pública.

“En septiembre de 2015 Agustina Brines (la exgerente de Divalterra) me llama y me dice que tiene instrucciones de Jorge Rodríguez para contratar a siete personas, y me remarca que ya tiene los nombres y apellidos y que son para gestiones de confianza en la empresa. Me pide asesoramiento y le digo que no puede ser, que venimos de una ley de 2013 que habla de racionalizar el sector público, que hay restricciones por los Presupuestos Generales del Estado y le digo que en la empresa no puede haber personal eventual”, ha explicado a preguntas del fiscal.

El denunciante ha asegurado que entregó un informe contrario a las contrataciones a los dos gerentes (Brines y José Ramón Tiller) y al asesor jurídico exterior Santiago Blanes, que le expresó también sus dudas al respecto porque “no iban a ejercer como altos directivos”.

Este testigo ha subrayado que los contratos de alta dirección “nunca” pasaron por el consejo de administración de Divalterra y ha insistido en que se ocultaron a ese órgano informes contrarios a los mismos.

“No hubo ninguna convocatoria pública. La señora Brines me dijo que Jorge Rodríguez le había dado los nombres de las personas en 2015 y en 2018 Xavi Simón (que entonces era cogerente) me dice los nombres de otras dos personas (sustituciones de los primeros directivos). Durante dos años y medio la empresa fue un auténtico caos, con intereses partidistas y personales”, ha afirmado.

“El señor Simón me dijo que ahora el presidente era (Ximo) Puig pero que el próximo presidente del PSOE iba a ser Rodríguez y que teníamos que ayudarle. Que todos saldríamos ganando”, ha apuntado.

Este testigo ha defendido que ninguno de los directivos ejerció nunca labores de alta dirección, “algunos ni siquiera de dirección, sino de técnicos, y a otros apenas les dejaban realizar ningún trabajo por desavenencias internas”.

También ha expuesto ante el tribunal que tanto Simón como Jorge Cuerda (letrado de Divalterra) le presionaron para hacer un informe avalando los dos últimos contratos de alta dirección “para los intereses particulares del señor Rodríguez”, pese a que, según ha asegurado, Cuerda estaba inicialmente en contra de esos contratos.

Posteriormente, a pregunta de las defensas, Pellicer ha afirmado desconocer otros informes que sí que avalaban dichas contrataciones y ha explicado que su actuación inicialmente se limitó a “transmitir sus dudas a sus superiores”. “¿Qué iba a hacer, inmolarme todos los días? Recurrían a mí porque era el tonto útil”, ha señalado.

Intenté hablar seis veces con el señor Rodríguez. Le pregunté dos veces al señor Cuerda si era consciente de qué se hacía en su nombre y que quería hablar con él. Y me insultaba y me gritaban, una barbaridad. Un asesor del presidente me dijo que sí que estaba al corriente. En tres ocasiones al señor Ferri le pregunté si el presidente estaba al corriente y que necesitaba hablar con él, en dos me dijo que sí y en una me dijo que no lo sabía”, recordó.

Pellicer narró que un asesor de Rodríguez, Ricard Gallego, insultó (con expresiones como “payaso” o “hijo de puta”) y presionó tanto a él como un auditor externo por cuestionar en un consejo los gastos de uno de los gerentes (Víctor Sahuquillo), aunque no reflejó lo que pasó en el acta.

El juicio se retoma este lunes en sesión vespertina a partir de las 16.30 horas, cuando Pellicer seguirá respondiendo a las preguntas de las defensas.