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Día de la Comunitat Valenciana

La Procesión Cívica llena las calles de Valencia para acompañar a la Senyera, que vuelve a entrar en la Catedral

La participación en el Te Deum no sucedía desde 2014, antes de que Compromís y PSPV formaran gobierno en el Ayuntamiento

La Procesión Cívica llena las calles para acompañar a la Senyera que vuelve a entrar en la catedral Rober SolsonaEUROPAPRESS

La ciudad de Valencia vive este lunes 9 d'Octubre, Día de la Comunitat Valenciana, uno de los actos más multitudinarios que se celebran en el municipio con la tradicional Procesión Cívica en una jornada festiva y reivindicativa de las señas de identidad valencianas. Una marcha en la que la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, ha portado la Senyera recuperando al mismo tiempo su entrada a la Catedral para participar en el "Te Deum", con la negativa de asistencia de los grupos de Compromís y PSPV.

Catalá, que es la segunda vez que porta la insignia de la Comunitat Valenciana tras hacer lo propio en 2019, ha asegurado que como primera edil, ha intentado "que la ciudad esté para este día bonita y preparada", al tiempo que ha dicho confiar en que "sobre todo, podamos decir muy alto lo que dice nuestro himno: cantos de amor y de paz".

"En un día como hoy, que los himnos de paz lleguen muy lejos, que termine la barbarie y sobre todo que los valencianos sean un ejemplo de democracia y de saber estar", y ha defendido que "somos gente pacífica; somos gente generosa; somos gente trabajadora y esforzada y que se siente muy orgullosa de su Senyera", ha manifestado.

Una de las novedades de este año es que, como consecuencia de las obras que se están llevando a cabo en la calle San Vicente, se ha modificado el recorrido de la Procesión, por lo que desde la plaza del Ayuntamiento, se ha dirigido hacia la calle de las Barcas, de ahí a Poeta Querol, Paz hasta llegar a la plaza de la Reina.

La otra novedad ha sido la recuperación del Te Deum, un acto religioso celebrado en la Catedral -la Senyera no participaba en el mismo desde 2014, un año antes de que PSPV y Compromís formaran gobierno municipal-. Al templo la enseña ha accedido por la puerta de los Hierros acompañada por la comitiva, excepto los partidos de izquierda.

La Real Senyera ha sido recibida en la entrada por el arzobispo de Valencia, Enrique Benavent, quien ha dirigido unas palabras en valenciano a los asistentes en las que ha pedido seguir trabajando por "un futuro en paz".

La procesión -declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial- ha sido abierta este año por la Escuela de Tabal y Dolçaina Russafa-fa, y los timbaleros de la ciudad han acompañado a la Senyera durante todo el recorrido, que este año ha sido alterado por las obras de saneamiento de la calle San Vicente.

Insultos a los grupos de la oposición

El itinerario de la Senyera ha discurrido por la plaza del Ayuntamiento, las calles Barcas, Poeta Querol y Paz y la plaza de la Reina, con vítores y aplausos a la comitiva, y algunos insultos y abucheos a los concejales de Compromís y el PSPV, partidos que han gobernado el Consistorio desde 2015 hasta las pasadas elecciones municipales del 28M, que ganó el PP.

En declaraciones a los periodistas, antes del inicio de la procesión, la portavoz del PSPV y exvicealcaldesa, Sandra Gómez, ha lamentado que la Senyera se llevara a un sitio cerrado "donde todos los valencianos" no pueden tener acceso, en referencia a la Catedral.

Gómez ha advertido asimismo de que hay un tramo de la procesión cívica donde "solo están representados unos pocos", y ha recordado que la bandera "volverá a presidir las calles, sin que nadie se la lleve a un sitio cerrado para unos pocos".

El portavoz de Compromís en el Ayuntamiento y exalcalde de València, Joan Ribó, ha coincidido en esta opinión al afirmar que en los últimos ocho años la procesión se ha aproximado a otras religiones y a asociaciones centenarias para que pudiera estar toda la población representada, pues un 40 % de los ciudadanos no es creyente y casi un 3 % profesa una religión distinta a la católica, y ha propuesto que si se hace el Te Deum, sea tras la procesión.

A su llegada al Parterre, se ha realizado la tradicional ofrenda floral ante la estatua ecuestre del rey Jaume I el Conqueridor, fundador del Reino de Valencia, y tras este acto Catalá ha destacado el ambiente de "convivencia, de alegría y de libertad" que se respira en esta jornada festiva en la ciudad.

Acabada la ofrenda, la Procesión Cívica ha vuelto al Ayuntamiento por las calles de Pintor Sorolla y Barcas, ha sido izada para ser depositada en el hemiciclo y ha cerrado el acto una mascletà en la plaza, disparada por la pirotécnica castellonense Reyes Martí, distinguida precisamente este 9 d'Octubre por la Generalitat.