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One Republic: “Etiquetamos a las personas y las juzgamos sin conocerlas y eso lleva a la división social”

El grupo estadounidense acaba de publicar «Human» y de cancelar in extremis su gira por España
La Razón

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Extrañas situaciones de la pandemia: One Republic tenían programados dos conciertos en España la semana que viene, en concreto en Madrid y en Sevilla, los días 28 y 29 de septiembre. El miércoles por la tarde, Zach Filkins, descolgaba el teléfono para hablar de ello y de su recientemente publicado nuevo disco, «Human». El jueves por la mañana, la banda anunciaba la cancelación del concierto debido a la suspensión de la cita en Lisboa unos días antes. Pero no íbamos a dejar la conversación en el tintero. «Están siendo tiempos difíciles. Todo el mundo lo está pasando mal y necesitamos salir de esta situación. A mí me ha servido para estar con mis hijos casi dos años, algo impensable cuando la actividad es normal. Pero, como artistas, los conciertos son nuestra vida».
–¿Cuál es su idea del éxito?
–Ha ido cambiando. Mi primera idea era firmar por un sello, sacar un disco. Pensábamos que ya con eso cumplíamos nuestro sueño, pero luego no era así para nada. Porque llegó «Apologize» y fue una explosión increíble. Y entonces nos dimos cuenta de que quizá el éxito sería tener más canciones, más discos, porque un solo tema desaparece en el viento. Ahora, tras 17 años de carrera, nuestra idea del éxito ha vuelto a cambiar: queremos ser relevantes y girar a lo ancho del mundo y, a la vez, poder pasar tiempo en casa y no vivir como locos. Creo que la idea del éxito es el equilibrio. Tener presencia en el mundo y en nuestra propia casa. Puede que en el futuro nuestra idea del éxito vuelva a cambiar.
–¿Cómo fue la explosión de «Apologize»?
–Lo más alucinante del mundo, porque en aquel momento teníamos nuestros trabajos individuales y tratábamos por todos los medios de intentar buscar un concierto en Los Ángeles en un día determinado y juntarnos para tocar. Solo queríamos sobrevivir, literalmente. Fuimos viendo crecer la canción hasta que un día nos dijeron que teníamos que dejar el trabajo. La sensación no se puede describir.
–Acaban de publicar, finalmente, 5 años después, «Human».
–Bueno, llevamos tanto tiempo esperando que algunas canciones ya eran como objetos preciosos que atesoras. Cuando llegó la pandemia, además, empezamos a cambiar cosas porque nunca estamos satisfechos plenamente y queríamos cambiarlo entero. Así que ha sido un verdadero alivio publicarlo.
–¿Qué debe tener una canción de One Republic?
–Tiene que sonar... inspiradora y optimista, es importante que levante el ánimo. Y nunca hemos querido ser una banda solo americana y hablar solo para la gente de nuestro país. Hay mucho dolor en el mundo y creemos que la música debe ayudar un poco, debe elevar a la gente. Y aliviar la tristeza o el estrés de la vida.
–¿La música cura?
–Sin duda. En nuestro país estamos tan divididos que la música es la respuesta. Hay algo en la música que ni siquiera necesitas palabras para decirlo, es un sentimiento que te lleva a otro lugar. Ahora que vivimos el drama político en todas partes, necesitamos sentirnos positivos para seguir adelante.
–¿Cuál es su percepción sobre la política en EE UU?
–Nosotros no somos una banda política, así que no hacemos declaraciones como colectivo. Pero sí diría que creo que, aunque suene un poco cursi, necesitamos amarnos más y dejar de ponernos unos a otros en categorías. Es fácil decir: «Ah, claro como has dicho eso, ya eres tal o cual cosa». Y entonces definimos a alguien en una categoría y le ponemos una etiqueta. Pero creo que uno de los problemas políticos más grandes que tenemos es que no nos detenemos antes de juzgar a realmente entender de verdad al otro. Simplemente vamos muy rápido, ponemos categorías a la gente y eso lleva a la división social. Y ese ese es un grave problema.
–Usted se crió en Barcelona.
–España es un país muy especial para mí. Fuimos allí cuando yo tenía 7 años y vivimos 8 años. Mi padre era profesor de Biblia y allí aprendí a tocar la guitarra y a jugar al fútbol. Tengo recuerdos preciosos.
–Cuénteme alguno.
–Bueno, algo mágico fue que pude estar en la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Barcelona. Buscaron a chicos para representar a cada país que había albergado u nos juegos anteriormente y a mí me eligieron para representar a Los Ángeles 82. ¡Fue la primera vez en mi vida que tuve que hacer algo delante de mucha gente! Fue muy emocionante. Me trae muchos recuerdos de mi infancia, la comida, la playa... Por entonces, me sentía igualmente cómodo expresándome en español e inglés, pero ahora, cuando lo intento... bah. Es como que está en el fondo de mi mente, pero cuando voy a hablar... no funciona.