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Cultura

Ni camisetas sin manga ni chanclas: La Scala se harta de los horteras

La dirección de la ópera pide a los visitantes recuperar viejas costumbres y "elegir vestimenta acorde con el decoro del teatro"

Imagen del interior de La Scala de Milán larazon

El código de vestimenta en La Scala de Milán no es nada nuevo. Nunca se fue. Siempre estuvo ahí, sin embargo, en 2015 dejó de aparecer impreso en la entrada. Un paso más que suficiente para que su público comenzara a virar hacia una ropa más informal. El boleto ya no indicaba la necesidad de acudir en traje (preferiblemente oscuro) a las representaciones, así que el pueblo optó por la comodidad en detrimento de la elegancia y el saber estar.

El entonces superintendente, Alexander Pereira, se imaginó una oleada de visitantes, en concreto de turistas internacionales, con "dress code" más relajado.

Basados en "el buen gusto" del público, la decisión fue la de "sugerir" en lugar de imponer. Dominique Meyer, sucesor de Pereira aseguró que le importaba que las nuevas generaciones se acercaran hasta el teatro, "no cómo visten". Bien lo sabía él, que ya experimentó de joven la mirada crítica de algunos parisinos cuando, de niño, acudió vestido como un trabajador a la Ópera Garnier, como recuerda el medio italiano 'Panorama'.

La Scala de Milán representa lo más sagrado de la lírica italiana en el mundolarazon

Y de aquellos barros, estos lodos en los que el problema, señalan, no está tanto en los jóvenes como en los turistas y sus ropajes playeros o de senderistas urbanos.

Ni entrada ni devolución del dinero

Así, el protocolo vuelve a imponerse en La Scala. Ahora, nuevos carteles avisan en la entrada y en la taquilla nas normas: "Quien no respete el código de vestimenta no tendrá derecho a entrar ni a la devolución de su entrada".

No se obliga a grandes derroches, ni a llevar corbata, ni al vestido largo, pero sí "un mínimo" de estilo: nada de camisetas de tirantes, tampoco pantalones cortos y, por supuesto, las chanclas quedan desterradas. Todo en nombre del decoro y el respeto a la escena y al resto de espectadores.

Eso sí, las damas sí podrán enseñar el hombro siempre que se porten blusas elegantes o vestidos sin mangas. Pero sí quedan abolidas esas camisetas interiores blancas de la que Bruce Willis hizo gala en 'Jungla de cristal'.