Sí, hay ganas de toros: Istres confirma la tendencia al alza en la asistencia

En tiempos donde muchas voces se empeñan en dar por agotada la tauromaquia, la realidad vuelve a desmentir los tópicos. La temporada 2025 arranca con datos concretos que invitan al optimismo: el público no solo sigue ahí, sino que responde con entusiasmo. Lo confirman dos plazas muy distintas y separadas por más de mil kilómetros, pero unidas por la misma pasión: Istres y Madrid.

La localidad francesa de Istres ha comenzado el año con una notable subida en su base de abonados. A día de hoy, ya se han vendido 1.800 abonos, lo que supone un 20 % más que en 2024. Es una cifra más que significativa para una plaza de su tamaño, y refleja que el trabajo bien hecho, cartel tras cartel, va calando en la afición. La respuesta temprana del público demuestra que hay ganas de toros, de emoción y de vivir la experiencia completa del festejo.

El caso de Las Ventas es aún más rotundo. La Feria de San Isidro 2025 ha batido su propio récord de abonados con 17.536 renovaciones, lo que implica 961 más que el año anterior y más de 3.500 nuevos desde 2022. Un crecimiento sostenido que rompe con inercias pasadas y que demuestra que el vínculo entre Madrid y su feria grande está más vivo que nunca.

¿Qué está pasando? ¿Estamos ante una recuperación estructural o una respuesta coyuntural? Puede que haya de todo un poco. Pero lo evidente es que, tras años de incertidumbre y desafíos, el público está volviendo. En tiempos en que los precios de las entradas tienen al alza y las figuras más emblemáticas de la época han dado un paso al costado, los nuevos nombres que saltan en el escalafón y la apuesta por abrir las puertas a las nuevas generaciones parecen estar surtiendo efecto.

Francia y España, cada una con su estilo, apuntan en la misma dirección: la tauromaquia interesa, emociona y moviliza. Y lo que ocurre en las taquillas es la mejor prueba de ello.