Toros

Fórmula 1

Los insultos de Girauta, Fran Rivera y Sánchez Dragó a Hamilton por los toros

Los amantes de la tauromaquia han salido para defender su pasión

El inglés Lewis Hamilton (Mercedes), séxtuple campeón mundial de Fórmula Uno, mostró su rechazo a la tauromaquia, indicando, junto a la imagen de un toro malherido y ensangrentado, que, en su opinión, “esto es realmente asqueroso, España!”

"No permitas que la tortura se disfrace como cultura", escribió, sobre la imagen del toro muerto, en su cuenta de Instagram, Hamilton, que, al ganar el año pasado su sexto título mundial, se encuentra a uno solo del récord absoluto en la categoría reina del motor, que detenta el alemán Michael Schumacher. El inglés anima de esta manera a sus seguidores a firmar una petición para que el Ministerio de Educación y Formación Profesional español deje de subvencionar a las escuelas taurinas.

Y los amantes de los toros en España saltaron. Primero Cayetano, después el ministro de Cultura y Deporte y los últimos Fran Rivera, hermano de Cayetano y el escritor Sánchez Dragó:

“Una persona que no tiene ni idea de lo que habla lo primero que ha de hacer es informarse. Va pasado y sobrado de soberbia. Y de incultura. Es una falta de respeto a España”, aseguró Rivera en Antena 3: “No ha estado un minuto de su vida en una escuela de tauromaquia a ver qué se enseña allí”.

Sánchez Dragó lo hizo en un tuit: “¿No se requiere un mínimo de inteligencia para sacar el carnet de conducir? ¿Cómo es que se lo han dado a Lewis Hamilton?”

Y también el ex de Ciudadanos Juan Carlos Girauta: “¿Y éste ágrafo quién es?

Hamilton apuntará a un séptimo título mundial dentro de tres fines de semana, cuando arranque un campeonato con numerosos aplazamientos y cancelaciones a causa de la pandemia del covid-19, que se pondrá en marcha -tras anunciarse las primeras ocho carreras de la temporada, todas ellas en Europa; y a falta de conocer el resto de las pruebas que conformarán el calendario 2020- con el Gran Premio de Austria, en el Red Bull Ring de Spielberg, en Estiria. EFE