Eurocopa 2016

Cristiano quiere la primera

Cristiano quiere ser el primer capitán de Portugal en levantar una copa
Cristiano quiere ser el primer capitán de Portugal en levantar una copalarazon

«Cristiano Ronaldo es un ejemplo para todos. Es un gran jugador y una gran persona», dice Pepe. Cristiano es el líder de una generación que quiere dar a Portugal su primer gran campeonato. Es la obsesión del madridista, lo único que le falta. Ha ganado la Champions con el Manchester United y con el Real Madrid, ha ganado la Liga y la Copa en Inglaterra y en España, ha ganado el Mundialito y la Intercontinental, ha sido máximo goleador de todo, pero le falta ganar un título con su país.

Cristiano carga desde 2004 con la frustración de la final perdida contra Grecia en su casa, en Lisboa. Como ahora, los portugueses llegaron al partido decisivo después de un gol suyo de cabeza en la semifinal. Pero en estos doce años, el «7» de Portugal ha recorrido un camino que le ha convertido en un jugador y en una persona diferente. En 2004 acababa de disputar su primera temporada en el United, al que llegó después de deslumbrar a Alex Ferguson en un amistoso con la camiseta del Sporting de Portugal. Fueron los jugadores los que convencieron a Sir Alex de que debía fichar a aquel extremo que les había vuelto locos con sus regates. Una suerte ahora abandonada por el jugador portugués, al que su voracidad goleadora le ha llevado a prescindir de los adornos.

«Esto es algo que siempre he soñado. Sería un gran logro el poder ganar algo con Portugal. Mis dedos están cruzados porque creo, mis compañeros creen, todo Portugal cree y la comunidad portuguesa que vive en Francia también», asegura en una entrevista con «Uefa.com».

Cristiano ha ido igualando récords durante el campeonato. El de Iniesta como el futbolista con más premios al mejor del partido y el de Platini como máximo goleador histórico de la Eurocopa, pero sabe que nada de eso sirve si no deja para la historia una foto con el trofeo como campeón de Europa. Sabe que su país le necesita, pero no quiere la gloria para él solo. «No quiero obsesionarme con los récords. Van llegando», dice. El camino de los años le ha enseñado, por ejemplo, a no esperar a lanzar el último penalti de la tanda para ser el héroe al que todos abrazan. Hace cuatro años, en la semifinal contra España se quedó sin lanzar el último penalti porque ya no era necesario. Contra Polonia, en los cuartos de final decidió tirar el primero. Antes, cuando Fernando Santos buscaba al quinto lanzador, convenció a Moutinho de que debía ser él aunque había fallado contra España en Donetsk en 2012. Y acertaron los dos, Moutinho y Cristiano.

Sólo Ricardo Carvalho, además de él, sobrevive en el equipo de aquella decepción de 2004. Falta Tiago, entonces un prometedor centrocampista del Benfica, al que la lesión que sufrió en noviembre le ha apartado del torneo. «Tenemos que ser positivos. El domingo será la primera vez que Portugal gane un trofeo importante», dice. Portugal vive en sus pies.