Alonso y Alpine, historia de un hartazgo mutuo

En Abu Dabi terminó una etapa más para Fernando Alonso en la F-1. Con 41 años, todavía es capaz de brillar en la categoría reina del automovilismo dejando en ridículo a algunas figuras con mucho menos edad que él. Ahora ya sólo piensa en «verde», es decir, en Aston Martin, el que será su equipo los dos próximos años y en cuyo coche se subirá el martes 21 durante unas cuantas horas en el entrenamiento que cada año organiza Pirelli en el emirato para probar los neumáticos del próximo curso. Algo que aprovechan los equipos para dar la oportunidad a sus jóvenes talentos y también para facilitar la transición a aquellos que cambian de escudería, como es el caso del asturiano.

Alonso cerró su tercer paso por Renault, ahora Alpine, la escudería que le dio la oportunidad de debutar en la F-1 y con la que consiguió dos campeonatos del mundo. Aquello fue en 2005 y 2006. Después marchó a McLaren y tras una experiencia desastrosa regresó a la estructura francesa. Dos años después se marchó a Ferrari; desencantado se fue otra vez a McLaren atraído por el proyecto de la asociación con Honda, algo que fue tan mal que Alonso optó por retirarse. Renault le rescató y apostó por él y dos años después ambas partes están contentísimas de tomar diferentes caminos.

El asturiano ha terminado harto de la poca evolución, de los fallos de estrategia y la fiabilidad del coche. Y en Alpine se quedan bastante tranquilos con su marcha. Internamente reconocen que el hartazgo es mutuo. Alonso acabó su historia con ellos abandonando con una avería en el motor. Una falta de fiabilidad que no ha afectado tanto a su compañero Ocon. El galo se convierte en el tercer piloto que, compartiendo box con Alonso, le gana la partida a final de año en la clasificación general. Antes lo hicieron Button (McLaren 2016) y Hamilton, que le empató, pero quedó por delante en el desempate (McLaren 2007). Ahora Ocon ha quedado por delante de Alonso con una diferencia de once puntos.

El español, con su cambio a Aston Martin, vuelve a vender ilusión, pero lo cierto es que va a un equipo inferior y del que Vettel ha salido retirándose por puro aburrimiento. Algo parecido a lo que sufrió Alonso con McLaren. Eso sí, hay dinero, mucho dinero, motores Mercedes y algunos ingenieros procedentes de Red Bull. Pero en la F-1 no se dan pasos de gigante ni en uno ni en cinco años. La edad no parece un impedimento para el español, pero algún día tendrá que serlo.

Estreno en Abu Dabi con Aston Martin

Alonso vuelve a la acción el martes 21en la pista de Abu Dabi para participar en el test que cada año organiza Pirelli con sus nuevos neumáticos. Lo hará ya en su nuevo monoplaza, el Aston Martin. Ahí tendrá media jornada, unas cinco horas, para obtener las máximas sensaciones posibles del coche y, sobre todo, del motor Mercedes. Será el quinto equipo de Alonso desde que debutara en 2001 en Fórmula Uno. A partir de ahí tendrá que trabajar en un equipo que no tiene a una multinacional detrás a pesar del límite presupuestario.