Rodrigo de Mesa: «Suplimos la falta de dinero con imaginación y echándole valor»

Este año se disputan cuatro Mundiales en España: baloncesto, ciclismo, vela y tiro. Éste último será en Granada (6-20 de septiembre), y el presidente de la federación, Rodrigo de Mesa, explica cómo organizarlo en tiempos de crisis.

–¿Cómo se puede organizar un Campeonato del Mundo «sin» dinero?

–Con imaginación. Cuando en su día lo solicitamos fue con el apoyo de la Administración. Estamos hablando de 2008, era interesante para todas las federaciones tener actividades de alto nivel en España, sobre todo enfocado a la posibilidad de que nos adjudicaran los Juegos Olímpicos. El Consejo ha apoyado desde el primer momento toda la dotación de infraestructura electrónica, de última generación, y el resto de las administraciones siguen apoyando, pero...

–Llegó la crisis y los recortes a las Federaciones...

–Se nos ha disminuido por la vía oficial la posibilidad de mayores recursos. La situación es la que es, nosotros no somos diferentes al resto de los sectores y tenemos que asumirlo. Esto lo estamos supliendo con imaginación, con patrocinios externos y echándole valor. Lo que nos queda por cerrar es la imagen corporativa, las exigencias técnicas para la transmisión, porque se emitirá por internet. El último Mundial en Múnich lo vieron casi 600 millones de espectadores y creo que vamos a aumentarlo. Nos jugamos las primeras plazas para los Juegos de Río y no va a faltar nadie. Puede haber entre 110 y 120 países, unas 4.000 personas entre deportistas y oficiales, 150 árbitros... Va a ser entretenido.

–¿Han calculado el retorno que tiene organizar un evento así?

–En Granada estarán los cuatro equipos del Mundial de Baloncesto hasta el 4 de septiembre y después nosotros entramos el 6. Y vamos a estar 15 días ocupando todos los hoteles de la ciudad. Además, en este deporte se empieza a ser veterano a los 55 años y la repercusión dentro del consumo es importante. Esto viene bien, pero a veces ese retorno que damos no se ve señalado en lo que recibimos. Sabes que en este país aparte del fútbol, el resto no existe.

–¿En algún momento ha visto peligrar su celebración?

–Entre otras cosas, nosotros necesitábamos el campeonato para modernizar las infraestructuras, porque nuestro deporte es técnicamente complicado. Tienes que tener una instalación con blancos electrónicos de última generación, porque si sales fuera y no has entrenado con los mismos equipos que te vas a encontrar, no te comes un colín. El problema es que estamos dentro de ese entorno general económicamente deprimido. Hemos llamado a todas las puertas y ya tenemos acuerdos cerrados, y estamos pendientes de más patrocinios, sobre todo de Centroeuropa, porque toda la gran industria alrededor del tiro es centroeuropea.

–¿Ve peligrar el deporte minoritario en España?

–Por los datos macroeconómicos, el país empieza a subir. Los datos de crecimiento son innegables, aunque la gente en el día a día no lo notamos todavía. Ahora mismo el segundo país en crecimiento en el entorno europeo es España, detrás de Alemania; los grandes números despegan, se han empezado a aumentar las exportaciones y parece que la destrucción de puestos de trabajo se ha detenido. A partir de ahora empezaremos a subir, y si sube el país se hará en todos los niveles. Lo que debe decidir la Administración es el criterio que quiere para el deporte en general. Hasta ahora había un modelo y lo que hay que ver es si se sigue manteniendo o tenemos que cambiarlo.

–¿Cambiar en qué sentido?

–Por ejemplo, si hay un criterio en el que la dependencia de los organismos públicos va a ser menor, nos tendrán que dotar a las federaciones de herramientas, vía ley de mecenazgo, de micromecenazgo... hay muchas fórmulas. Por ejemplo, en Argentina lo que tienen es un porcentaje de las llamadas de teléfono que van al organismo correspondiente para financiar el deporte. Cada país tiene fórmulas imaginativas diferentes, de forma que al deporte, que es un tema que afecta a todos (integración, formación, valores...) se le dota de herramientas para poder funcionar.

–¿Se puede vivir del tiro en España?

–Del deporte sólo viven unos cuantos futbolistas, que viven mucho y uno solo de ellos tiene más dinero que el resto del deporte junto. Pero esto es aparte. En términos generales, los deportistas de alta competición son profesionales pero sin cobrar. Nosotros tenemos a los chavales concentrados en la Blume, y entrenan una media de cuatro horas diarias, con puntas de ocho. Alberto Fernández o Jesús Serrano, los dos mejores tiradores de plato, entrenan de 25.000 a 30.000 platos al año. Tú me dices si puede vivir alguien del deporte, pues básicamente, no. Lo que intentamos es buscar salidas profesionales a los deportistas para que de pronto no se queden sin red y se caigan. La mayoría de deportistas de pistola y carabina de la Blume hacen oposiciones a la Policía Nacional, que tiene una unidad que engloba a los deportistas de alto nivel y les facilita el entrenamiento. A las federaciones nos soluciona un problema, ellos venden imagen y los deportistas no están con la obsesión de saber qué va a pasar con ellos.

–Es un deporte difícil de promocionar. En el fútbol, por ejemplo, se juntan tres niños, un balón y pueden jugar...

–En Europa el tiro es uno de los deportes más importantes, en el COI está en el quinto puesto. Alemania, por ejemplo, tiene por encima del millón de Federados. Aquí, que están separadas la caza y el tiro, hay entre 400.000 y 500.000 de caza y 65.000 en tiro deportivo. En Francia, unos 700.000. Aquí hay una cierta imagen negativa que en el resto de Europa no existe. Quizá nosotros no hemos sabido venderlo o quizá han faltado recursos. Pese a todo, la relación de tiradores de nivel que tenemos con el número de practicantes es alta. En los últimos 5 años siempre hemos estado en el podio de federaciones con mayor número de medallas en Mundiales, Europeos...