Tenis

Remontada a lo Nadal de Zverev, el verdugo de Nadal en Roland Garros: perdía 4-1, con dos breaks, en el quinto set

El alemán se impuso por 3-6, 6-4, 6-2, 4-6 y 7-6 (10/3) a Griekspoor y se mete en octavos de final

Germany's Alexander Zverev plays a shot against Tallon Griekspoor of the Netherlands during their third round match of the French Open tennis tournament at the Roland Garros stadium in Paris, Saturday, June 1, 2024. (AP Photo/Christophe Ena)
Zverev golpea de revés en su partido contra Griekspoor en Roland GarrosASSOCIATED PRESSAgencia AP

Alexander Zverev tuvo un bombazo en primera ronda: le tocó jugar contra Rafa Nadal, que llegaba a Roland Garros por primera vez sin ser cabeza de serie después de los problemas que ha tenido durante el último año y medio. El alemán venció al rey de París en tres sets corridos, se convirtió en el tercer tenista en la historia capaz de vencer al español en esas pistas, y su favoritismo se disparó. Ya lo era, pues llegaba en plena forma, de imponerse en el Masters 1.000 de Roma, pero después de superar a Nadal y de la forma en la que lo hizo, pues todavía más.

Pero su camino estuvo a un paso de cortarse mucho antes de lo esperado. Después de derrotar a Goffin sin demasiados apuros en segunda ronda, el neerlandés Griekspoor le llevó al límite en la tercera: 3-6, 6-4, 6-2, 4-6 y 7-6 (10/3). Le ganó el primer set. Zverev parecía que había empezado a bajas revoluciones, pero los partidos a cinco sets son muy largos. Enderezó el rumbo y después de desatascarse en el segundo set, ya parecía volar a por la victoria. Arrasó en el tercero... Pero en el cuarto Griekspoor se soltó. Sin nada que perder, el "tulipán" empezó a ser todavía más agresivo, a molestar con las dejadas, continuaba pisando la red, y volvió a creer en sus posibilidades... Hasta que tuvo el partido en sus manos.

La remontada

Con ese tenis ofensivo, Griekspoor llegó a ponerse 4-1 en el quinto set, con dos breaks de ventaja. Veía la victoria ya a un paso, la acariciaba, pero volvió a demostrarse que el tópico que dice que en el tenis hasta que no se gana el último punto no se puede cantar victoria, es cierto. Llegó la remontada de Zverev y el hundimiento del neerlandés, que se empezó a liar y comenzó a jugar demasiado con el revés cortado y a no seleccionar tan bien las subidas.

En no demasiado tiempo pasó el 4-1 al 4-4. Todavía se dio otra oportunidad llegando al super tiebreak, pero en ese desempate definitivo sólo hubo un jugador. Zverev en ningún momento perdió la cabeza, ni siquiera en una discusión con la juez de línea por una bola dudosa en la que el jugador no tenía razón. Su experiencia salió a flote e incluso la fortuna se puso de su parte: uno de los diez puntos que sumó en el tie break final fue después de que la pelota tocara la cinta, saltara par superar la raqueta de Griekspoor, y cayera dentro por mucho en la pista.

Zverev sobrevive y los favoritos, de momento, no fallan: Rublev es el único “top 10” que se quedó en el camino, en un partido en el que la lío.