Vivienda

Los jóvenes tendrían que duplicar su sueldo para comprarse una casa

Deberían cobrar 1.935 euros para acceder a una vivienda en propiedad sin destinar más del 30% de sus ingresos. La entrada de una casa ya les supone 4 veces su sueldo anual, 47.000 euros

Vida cotidiana durante el confinamiento por COVID-19
Una joven toma el sol en el balcón de su viviendaVillar LópezEFE

Los jóvenes tendrían que duplicar su salario hasta cobrar 1.935,57 euros mensuales para poder comprarse una vivienda sin destinar más de un 30% de sus ingresos. Esa cantidad supone el doble (101,41% más) del sueldo de los asalariados de menos de 34 años. Normal que el 46,4% de los españoles entre 25 y 34 años aún viva con sus padres, según los datos publicados hoy por Eurostat, recogidos por Servimedia. Esto convierte a España en el sexto país de la Unión Europea con más jóvenes que no han abandonado el hogar paterno en un contexto de precariedad laboral marcada por la temporalidad, los bajos salarios y la actual crisis del Covid-19, que ha situado en situación de riesgo de pobreza y exclusión social a uno de cada cinco jóvenes españoles. El 55,4% de los jóvenes que tenían un puesto de trabajo al finalizar el pasado año disponían de un contrato temporal.

Con estos antecedentes, un joven que quiera comprar una casa financiando el 80% del precio de venta debería pagar una entrada de 4,1 veces su sueldo anual, según los datos publicados por el Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España (CJE). Esto equivaldría a unos 47.104,8 euros de entrada. Las dificultades para acceder a la vivienda se arrastran para este colectivo desde hace una década, según el CJE. Incluso los jóvenes más mayores, entre 30 y 34 años, tendrían que cobrar un 48,23% más para poder hacer frente a una casa en propiedad.

En el Día Internacional de la Juventud, que se celebra hoy, se valora que la opción del alquiler tampoco sería válida, ya que implicaría para la mayoría de los jóvenes de hasta 29 años dedicar un 90,7% de su salario. En Cataluña, Baleares y Madrid, el coste de acceso a una vivienda libre en alquiler superaría el 100% de sueldo; es decir, es materialmente imposible que los jóvenes de estas regiones se emancipen en solitario.

Compartir piso, la única opción

La única opción para los jóvenes con empleo es, según el informe del Observatorio de Emancipación, compartir piso. Esto costaría a cada joven una media de 287,45 euros (el alquiler medio de una habitación), es decir, un desembolso del 29,9% de su salario, cuando el porcentaje máximo de sus ingresos que una persona puede dedicar a la vivienda es un 30% para poder afrontar el resto de gastos.

Una vivienda entera de alquiler supondría para un trabajador joven el 44,3% de su salario, lo que resulta prácticamente imposible. Eso se debe a que el precio de la vivienda en alquiler en España continúa con una considerable escalada que, de media, alcanza los 872 euros mensuales al cierre de 2019. El esfuerzo económico que conllevaría sufragar el precio de la vivienda de alquiler para una persona joven, ya tenga o no trabajo, y en solitario equivaldría al 90,7% de su salario neto.

El CJE denuncia que muchos programas y ayudas a la compra o al alquiler de vivienda para jóvenes son “de facto inaccesibles para personas menores de 30 años”, ya que “incluyen requisitos como contratos fijos de trabajo o cierta permanencia”, algo inalcanzable para muchos jóvenes.