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Las grandes aerolíneas perdieron 46.787 millones de euros en 2020

Estos datos chocan con los beneficios obtenidos en 2019, que ascendían a 12.789 millones de euros

Un avión despega este viernes del aeropuerto bilbaíno de Loiu, con varias aves alrededor de la pista de rodadura
Un avión despega este viernes del aeropuerto bilbaíno de Loiu, con varias aves alrededor de la pista de rodaduraLuis TejidoEFE

El coronavirus no ha dejado títere con cabeza. El turismo, fruto de las restricciones de movimiento, ha sufrido un fortísimo varapalo. Las aerolíneas no han cuajado buenos resultados: ayer se supo que Lufthansa perdió 6.725 millones de euros. Los números globales son, si cabe, más escalofriantes: las grandes líneas europeas y americanas acumularon pérdidas de 46.787 millones de euros en todo 2020.

Estos datos chocan con los resultados cosechados un año antes: en 2019, las grandes aerolíneas obtuvieron una cifra total de beneficios de 12.789 millones de euros.

Motivo de este descenso fue el cierre del tráfico aéreo que se produjo en marzo fruto del auge del coronavirus. Todas las restricciones de movimiento mantuvo a los aviones aparcados y a los viajeros en sus casas: sólo hubo un tercio de pasajeros con respecto a 2019.

Pérdidas multimillonarias

Las aerolíneas europeas acumularon unas pérdidas de 20.762 millones de euros, mientras que las americanas lo hacen de 26.000 millones de euros.

Las líneas europeas estudiadas están conformadas por IAG, Air France/KLM y Lufthansa, mientras que las americanas son American Airlines, Delta, United Airlines y Southwest. Ambos grupos habían obtenido beneficios de 3.218 millones de euros y 9.800 millones de euros en 2019, respectivamente.

Tras una durísima primera oleada de contagios de la covid-19, entre marzo y junio, con Europa y América cerradas a cal y canto, la situación se alivió algo en verano, pero se trató de una "mejoría" (los números siguieron muy por debajo de los de 2019) transitoria, porque en otoño comenzó la segunda ola, también con consecuencias dramáticas.

Deuda disparada

Con los aviones parados, las compañías han quemado liquidez como nunca antes y han debido recurrir a diversas herramientas para asegurar su solvencia, bien en forma de préstamos respaldados por los Estados, en forma de ampliaciones de capital o con diferentes fórmulas como la venta y posterior arrendamiento de aviones.

El resultado es un aumento sustancial de la deuda: de los 51.400 millones que acumulaban en 2019, en 2020 han cerrado al doble, algo más de 100.000 millones.

Fuente: EFE.