Banca

Santander descarta utilizar el exceso de capital para fusiones o compras bancarias

El CEO de la entidad, José Antonio Álvarez, descarta cualquier operación con BBVA o Sabadell: «No las contemplamos»

El consejero delegado del Banco Santander, José Antonio Álvarez Álvarez, en la presentación de resultados
El consejero delegado del Banco Santander, José Antonio Álvarez Álvarez, en la presentación de resultadosZipiEFE

Ni compras, ni fusiones, ni operaciones de gran envergadura. Banco Santander prefiere pisar suelo firme y conocido lo que queda de este ejercicio y el siguiente, y descarta cualquier operación con otra entidad bancaria española. La cúpula del banco que preside Ana Botín lo tiene claro: la recuperación económica tras la crisis pandémica «reduce los riesgos» y mejora las previsiones para el próximo año, pero no van a correr riesgos.

El consejero delegado, José Antonio Álvarez, confirmó ayer en la rueda de prensa posterior a la presentación de resultados del tercer trimestre que el banco va a liberar provisiones de hasta 1.000 millones de euros en base a que las proyecciones macroeconómicas que establecieron en el peor momento de la crisis del coronavirus han «mejorado significativamente. El escenario macro es mucho mejor, por lo que nos van a sobrar entre 700 y 1.000 millones de euros, que quedarán apuntados en el último trimestre», defendió. El director financiero, José García Cantera, confirmó que se reducirán casi a la mitad estas provisiones.

Y este «sobrante» se unirá a un potencial exceso de capital gracias a que la ratio fijada por el consejo se sitúa en el 11%-12% y que la rentabilidad del banco se colocará en el rango del 13%-15%. Álvarez no dio pistas sobre qué hará la entidad con ese capital y se limitó a confirmar que será el consejo de administración el que decida si se reparte o si encuentran «oportunidades de inversión más atractivas», pero sí dejó claro que no será para ninguna operación de compra. «No las contemplamos».

De esta forma tajante descartó que ese exceso de capital acumulado se vaya a utilizar en una operación de compra «ni en España ni fuera. Serán la Asamblea y los accionistas los que decidan qué se hace con ese dinero, si se remunera o se invierte». Ante la insistencia de los medios de comunicación sobre una posible oferta por BBVA o Sabadell, Álvarez descartó expresamente una posible fusión con BBVA –«ni la hemos analizado ni pensamos analizarla–, ni con Sabadell –«ni siquiera conocemos su valor de mercado», sentenció.

Precisamente sobre esta remuneración accionarial, la entidad que preside Ana Botín ratificó sus intenciones de fijar una retribución a cuenta de los resultados de este año, como ya anunció el pasado mes de septiembre. Así, el grupo repartirá cerca de 1.700 millones de euros, con un dividendo en efectivo de 4,85 céntimos por acción, y ofrecerá una retribución adicional en el primer trimestre del año que viene con cargo a los beneficios de 2021, que ascendería a otros 3.500 millones, de los que aproximadamente el 50% sería en efectivo y el otro 50%, en recompra de acciones (el 3% del capital), que supondría unos 841 millones de euros.

Pero este clima de optimismo, gracias al beneficio atribuido de 5.849 millones, el mayor beneficio ordinario de Santander en unos primeros nueve meses del año desde 2009, no valió para que los inversores reflejaran en el parqué estas cuentas. Santander fue el valor que más cayó en la última sesión bursátil, un 2,85%, penalizado a pesar de que los resultados han estado por encima de las previsiones del consenso del mercado.