Carburantes

El precio de la gasolina no tiene techo y bate un nuevo récord: 1,558 euros el litro

Marca máximos por segunda semana consecutiva. La gasolina se ha encarecido un 5% en el último mes y llenar un depósito cuesta ya 86 euros

Una empleada de una gasolinera, surte combustible a un vehículo
Una empleada de una gasolinera, surte combustible a un vehículoLuis TejidoAgencia EFE

No parece haber límite para la subida exponencial de los carburantes. El precio de la gasolina ha marcado un récord por segunda semana consecutiva, y se vende esta semana en España a una media de 1,558 euros el litro, tras subir un 1,3% en los últimos siete días, mientras que el del gasóleo lo hace a 1,444 euros, un 1,6% más, hasta alcanzar su segundo valor más elevado de la historia, según los datos difundidos este jueves por el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE). Solo en el último mes, la gasolina se ha encarecido casi un 5%, mientras que el gasóleo lo ha hecho más de un 6%.

El precio récord de la gasolina bate el registro histórico de hace siente días, pero bate también el registro de septiembre de 2012, que hasta ahora era la marca a batir pese a que ahora el precio del petróleo Brent es un 20% más bajo que entonces. El precio medio de la gasolina esta semana en España se sitúa en el citado 1,558 euros por litro, dejando atrás los 1,522 euros del récord de septiembre de 2012. Pero entonces, el barril de Brent, que es la referencia para fijar el precio del petróleo en Europa, cotizaba en el entorno de los 112,5 euros, frente a los 90 dólares de ahora. Esto supone que se ha superado el récord de la gasolina pese a que el crudo se comercializa un 20% más barato que en la actualidad.

De hecho, la última vez en que el Brent cotizó en el entorno de los 90 dólares como ahora, en octubre de 2014, el precio de la gasolina era de 1,41 euros por litro, un 10% menos que los 1,558 euros actuales. En el diésel ocurre algo similar ya que actualmente su precio, de 1,422 euros por litro, es solo un 1,5% inferior al de su récord histórico, que también es de abril de 2012 cuando llegó hasta los 1,444 euros. Además, es cerca de un 8% más caro que en octubre de 2014, cuando el barril rondaba también los 90 dólares.

Pese a que en el precio del petróleo influyen otros aspectos indirectos, como son los impuestos aplicados en cada país, el tipo de cambio entre el dólar y el euro y el margen obtenido por el proceso de refino, además del que se quedan las estaciones de servicio, la diferencia no queda compensada.

Con esta subida, la gasolina alcanza un nuevo máximo, tras superar hace una semana un récord que llevaba vigente desde hacía más de nueve años, y el gasóleo se sitúa tan solo un 0,1% por debajo de su precio más alto desde que existen registros. Así, el gasóleo solo se había pagado más caro en la semana del 3 de septiembre de 2012, hace también más de nueve años, cuando alcanzó un precio medio de 1,445 euros el litro. Ambos carburantes encadenan seis semanas consecutivas de subidas y mantienen la tendencia alcista con la que han empezado el año, tras el respiro que dieron durante las pasadas Navidades.

Sin embargo, y según el Boletín Petrolero, el precio de ambos carburantes en España se mantiene por debajo de la media europea, que se sitúa en 1,686 euros el litro para la gasolina, y 1,571 euros para el gasóleo en lo que va de año. La Asociación Nacional de Estaciones de Servicio Automáticas (Aesae) determinó en su último estudio sobre precios que España cerró 2021 como el país de la Unión Europea en el que más subió la gasolina el año pasado, con un aumento interanual del 22%, superando el precio medio de la zona euro (140 céntimos). Este incremento provocó que España cerrara el pasado ejercicio como el cuarto país con la gasolina más cara de toda la UE, tan sólo por detrás de Holanda (166 céntimos), Finlandia (151,6 céntimos) y Dinamarca (148,3 céntimos).

Los precios de los carburantes apuntan a que se mantendrán al alza durante largo tiempo, ya que el crudo seguirá en máximos durante todo el primer trimestre del año, alcanzando el barril de Brent los 90 dólares por primera vez desde octubre de 2014. El déficit estructural de suministro de los productores de la OPEP junto a la recuperación de la demanda global, a medida que el mundo supera el impacto de la variante ómicron, tiene como consecuencia inmediata la construcción de un mercado petrolífero deficitario en el primer trimestre de 2022.

Según los analistas, a partir de abril la situación podría cambiar si se logra un claro aumento de producción en el mercado mundial del petróleo, pero dependerá de si parte de la OPEP y sus socios, liderados por Rusia, confirman el anunciado aumento gradual de la oferta, que sumado al crecimiento en la producción de los países no pertenecientes al cártel provocaría una situación de superávit que rebajaría los precios, incluso por debajo de los 80 dólares por barril. Si no fuera así, la situación podría ir a peor se elevarse por encima de los 100 dólares y una escalada en los precios de la gasolina.

Ahora mismo, la escalada de precios iniciada en noviembre de 2020 de manera casi ininterrumpida ha provocado que el precio de la gasolina haya aumentado casi un 32%, frente al 35% que se ha encarecido el gasóleo. Con estos precios, llenar un depósito medio de 55 litros con gasolina cuesta actualmente cerca de 86 euros, mientras que con gasóleo supera los 79 euros. En comparación con la misma semana de 2021, la gasolina cuesta ahora un 26% más, frente al 29% que ha subido el gasóleo, mientras que si se analizan los precios de la misma semana de 2020, unos meses antes de que estallara la pandemia, tanto la gasolina como el gasóleo son cerca de un 20% más caros.