Operación salida
Esto es lo que le pasa a tu coche con el aire acondicionado puesto durante muchas horas
El climatizador es el aliado por excelencia de los conductores, sobre todo en una operación salida por vacaciones de verano
Julio y agosto, los meses de más calor en España, tienden a registrar altas temperaturas que no solo dificultan la estabilidad de las personas tanto fuera de casa como dentro de sus hogares, sino también a estas que trabajan viajando en vehículos privados o que usan días de verano para irse de vacaciones a la playa u otros puntos o en la operación salida. Así, el aire acondicionado, el gran aliado contra el bochorno veraniego, también sirve de ayuda para conductores, pues protege de problemas como la fatiga.
Bien es cierto que tener encendido el climatizador con unas temperaturas entre 22 y 24ºC ayuda a evitar tomar malas decisiones al volante, y por ende, reduce el riesgo de sufrir accidentes en los desplazamientos. Pero su uso desmedido puede provocar otros hándicaps que no todos los transeúntes conocen.
La climatización de un automóvil no deja de ser una máquina de frío que está compuesta por compresor, un condensador, una válvula de expansión y un evaporador. Con la repetición de un proceso que consiste en cambiar el estado de gas del depósito a líquido y de líquido a gas se consigue enfriar el habitáculo.
Pero el compresor se encuentra interconectado con el giro del motor mediante una correa y para cumplir su cometido, necesita de la mecánica del automóvil, es decir, que provoca un aumento del combustible. Si esto era ya un problema, este año, con la inflación que atraviesa España y la alta subida de precios, así como el incremento elevado del costo de gasolina o gasóleo, es posible que más de uno prefiera no hacer un desorbitado uso del aire acondicionado.
El tiempo es otro factor a tener en cuenta, ya que si la temperatura al montar en el coche es, por ejemplo, superior a 40 grados y se quiere reducir a unos 20 dentro del vehículo, se necesita más tiempo con el compresor trabajando que si el termómetro se situara a unos 25 grados.
No obstante, las cifras muestran de un aumento de entre un 5% y un 20%, y no suele llegar a más de un litro y medio de incremento cada cien kilómetros. Asimismo, en los climatizadores modernos, el compresor se apaga cuando alcanza la temperatura asignada, lo que el consumo se reduce.
También se debe tener en cuenta que el filtro del aire acondicionado debe estar limpio. Si el sistema de climatización del automóvil no enfría, uno de los posibles culpables es la suciedad en este. Según el fabricante, se debe de sustituir cada 20.000 kilómetros, aunque en algunos modelos puede llegar hasta los 30.000 kilómetros de vida útil.
Para limpiar o cambiar al filtro, se debe acudir a la parte baja del salpicadero, donde se encuentra, y tras localizarlo, extraerlo y comprobar si es mejor reemplazarlo o simplemente limpiarlo. Para esto, lo mejor es hacerlo con una pistola de aire a presión, aunque también vale con un spray de aire comprimido o una brecha.
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