La gasolina y el diésel se abaratan por séptima y sexta semana consecutiva

La gasolina y el diésel vuelven a dar su séptimo y sexto respiro consecutivo. Según los datos difundidos este jueves por el Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE), que recoge el precio medio registrado en más de 11.400 estaciones de servicio españolas entre el 2 y 8 de agosto, los precios de los carburantes continúan su senda a la baja en pleno mes de agosto, temporada alta de desplazamientos por carretera debido a las vacaciones, aunque el coste sigue distando mucho del registrado el verano pasado. En concreto, la gasolina es un 31% más cara y el diésel un 45% más caro con respecto a hace un año (sin tener en cuenta el descuento de 20 céntimos).

Del 2 al 8 de agosto, el precio medio del litro de gasolina se situó en 1,860 euros, tras registrar una bajada del 2,25% con respecto a la anterior semana, su séptimo descenso consecutivo. En el caso del diésel, el precio medio del litro fue de 1,854 euros, tras registrar una bajada del 2,10%, encadenando su sexta caída. Sin embargo, en la misma semana del 2021, la gasolina costaba 1,419 euros el litro y el diésel, 1,270 euros. El galopante encarecimiento de ambos carburantes ha provocado que el precio de la gasolina haya aumentado cerca un 31% con respecto a la misma semana de hace un año, mientras que en el caso del gasóleo se ha encarecido un 45%, aunque sin tener en cuenta la bonificación vigente actualmente.

En lo que se refiere a la gasolina, se trata de su nivel más bajo desde el pasado 2 de mayo, mientras que el gasóleo ha descendido a mínimos desde el 11 de abril. Con respecto a los niveles de finales de junio, cuando los carburantes vieron fin a la espiral alcista que venían registrando en lo que iba de año, la gasolina se ha abaratado un 14,4%, mientras que el gasóleo es casi un 13,26% más barato.

Ese importe medio incluye los impuestos, pero no refleja el descuento que entró en vigor desde el pasado 1 de abril de al menos 20 céntimos por litro, ya que hay descuentos superiores, dependiendo de la petrolera y de las promociones a los clientes fidelizados. Teniendo en cuenta esa subvención, el precio del litro de gasolina sería de 1,66 euros, mientras que el del gasóleo se situaría en los 1,654 euros, en ambos casos inferior a los que marcaba a finales de marzo, antes de la entrada en vigor de la ayuda, pero muy lejos de los valores de hace un año.

Con los precios actuales y aplicando el descuento, llenar un depósito medio de 55 litros tanto con gasolina como con gasóleo cuesta alrededor de 91 euros. Hace un año, en cambio, llenar un depósito de gasolina costaba 78 euros y uno de diésel cerca de 70 euros. Es decir, ahora cuesta entre 13 y 21 euros más caro.

Estas cifras se registran en un entorno de precios elevados del crudo en el actual contexto, marcado por la guerra en Ucrania. No obstante, este jueves el barril de Brent, de referencia en Europa, cotizaba por debajo de los 100 dólares (97,6 dólares), mientras que el Texas americano se intercambiaba a 92 dólares.

Una vez más, el precio de ambos carburantes en España -sin aplicar el descuento de 20 céntimos- se mantiene por encima de la media europea, que, según la estadística de la UE, se sitúa en 1,799 euros el litro para la gasolina, y 1,830 euros para el gasóleo. No obstante, si se comparan los precios sin bonificación de España con los de la zona euro, el coste del diésel en nuestro país es más barato que la media de la eurozona (1,864 euros), aunque la gasolina sigue siendo más económica que en España (1,848 euros el litro).