Tres calderas de gas que gastan menos de 800 euros al año

La proximidad del invierno y los elevados precios de la energía han apresurado al Gobierno y a los consumidores a buscar distintas soluciones para amortiguar la subida que experimentarán las facturas de luz y gas durante los próximos meses. El Ejecutivo, por su parte, anunció un paquete de medidas con el que pretende dar cobertura el 40% de los hogares españoles y entre cuyas medidas se encuentran la ampliación de los descuentos del bono social eléctrico, el incremento de la cuantía del bono térmico y la nueva TUR (tarifa regulada del gas) para comunidades de vecinos con calderas centrales. También con el objetivo de evitar que los consumidores paguen facturas desorbitadas este invierno, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha recomendado a los consumidores de gas que contraten la TUR, que puede llegar a ser hasta cuatro veces más barata que las tarifas del mercado libre. Con el mismo propósito, la OCU ha seleccionado las tres calderas de condensación, tanto para calefacción como para agua caliente, que mejor funcionan y que tienen unos costes anuales por debajo de 800 euros.

Caldera de condensación: cómo funciona y por qué es buena opción

“La mitad de la energía que gasta una vivienda se utiliza para calentarla y otro 20% se utiliza para agua caliente sanitaria. Por eso, es imprescindible contar con un sistema de calefacción lo más eficiente posible”, explica la OCU. Sin embargo, se estima que el 80% de los sistemas de calefacción instalados en Europa son ineficientes y que, en España, el 65% de los equipos tienen una clase energética C o inferior. Cambiar estas calderas por otras de condensación le permitirá ahorrar y ser más sostenible.

Aunque las calderas de condensación funcionan con gas, son eficientes y respetuosas con el medio ambiente ya que permiten aprovechar el calor latente. Estas calderas tienen la capacidad de condensar una parte importantede los vapores contenidos en los gases de la combustión, explica Félix Moreno, director técnico de Wolf, en declaraciones a BBVA. Esta energía que se genera durante la condensación se escapaba en forma de humo en las calderas tradicionales.

Esta mejoras de la eficiencia respecto a las calderas estancas estándar hace que el coste de funcionamiento anual de una caldera de condensación sea menor, alrededor de unos 30 euros anuales, y la diferencia en el precio de compra es de unos 300 euros. Además, este tipo de calderas se pueden utilizar con sistemas de baja temperatura (40 ºC/30 ºC), como son los radiadores de baja temperatura o el suelo radiante, aumentado el ahorro.

Tres calderas de condensación con bajo coste anual

Tras un análisis, la OCU ha seleccionado tres calderas que han obtenido excelentes resultados tanto para calentar estancias como para producir agua caliente sanitaria y cuyo coste anual, que incluye la amortización de su instalación a lo largo de 15 años de vida y sus costes de funcionamiento durante ese tiempo, es inferior a 800 euros al año.

Cointra Superlative Plus: su precio oscila entre 834 y 1.116 euros y cuenta con una potencia máxima de 25 kW. Entre sus puntos a favor se encuentran que es una caldera muy silenciosa, apenas consume electricidad, su rendimiento en calefacción es superior al 110% y su nivel de emisiones es muy bajo. No obstante, hay que tener en cuenta que el tiempo de espera para obtener agua caliente es largo, casi dos minutos.

Ariston Genus One Net: su precio oscila entre 1.081 y 1.438 euros y su potencia máxima es de 22 kW. Destacan ventajas como su excelente rendimiento en modo calefacción, su capacidad para mantener muy estable la temperatura del agua caliente y su velocidad para obtener agua caliente (menos de 1 minuto). En el lado negativo, tiene un consumo eléctrico alto en modo stand-by y es bastante ruidosa.

Chaffoteaux Inoa Green 24 Eu: su precio oscila entre 769 y 820 euros y su potencia máxima es de 23 kW. A favor de esta caldera está su excelente rendimiento en modo calefacción, buen funcionamiento y confort con agua caliente sanitaria, y su velocidad para obtener agua caliente (1 minuto). En contra, que es la caldera más ruidosa de las analizadas y que su nivel de emisiones es mejorable.