Ruptura

Inditex, H&M y Primark se divorcian de la patronal textil Acotex y crean su propia organización empresarial

Las compañías fundan la Asociación Retail Textil España (ARTE) para defender sus intereses ante administraciones y sindicatos

Una mujer entra en una tienda de Zara (Inditex) en La Coruña
Una mujer entra en una tienda de Zara (Inditex) en La CoruñaCabalarAgencia EFE

Divorcio en la patronal textil. Las grandes compañías del sector, con Inditex, H&M y Primark a la cabeza; han abandonado la organización empresarial Acotex y han fundado la Asociación Retail Textil España (ARTE) “como representante colectivo que dé voz a los puntos de vista del sector ante los retos que enfrenta en el ámbito económico, socio-laboral y regulatorio”, según han explicado las compañías en una nota. El grupo fundacional, en el que también están Mango, Iberian Sports Retail Group (JD Spain, JD Canarias, Sport Zone, Sprinter) y Uniqlo; supone un tercio del sector, añade el comunicado.

ARTE, según sus fundadores, tiene la vocación de “representar al conjunto del sector textil a nivel nacional”. Sus estatutos -que establecen inicialmente un umbral mínimo en empleo, superficie comercial y presencia territorial- prevén la posibilidad de incorporar a todas aquellas compañías que tengan intereses comunes con las que forman ya parte la asociación, con independencia de su tamaño, añade la asociación.

“ARTE representará las posiciones generales y comunes del sector en el ámbito institucional, y en particular, en su relación con las administraciones públicas en sus distintos niveles y las organizaciones sindicales representativas de sus trabajadores. Sus miembros tienen también el propósito de promover la libertad de empresa y de establecimiento, así como la de comercio y horarios comerciales, la unidad de mercado y compromisos en materia de sostenibilidad social y medioambiental”, según aseguran sus promotores.

La creación de la Asociación Retail Textil España llega en un momento clave. La nueva reforma laboral prioriza el convenio colectivo sectorial sobre el de las empresas. Así pues, los grandes grupos tienen ahora un interés particular –y probablemente diferente al de las pymes- a la hora de defender sus intereses para protegerse en cuestiones clave como los salarios o los contratos fijos discontinuos a tiempo parcial.