Energía

La escasa implantación del coche eléctrico aleja a España de la transición verde

"Alcanzar los 5,5 millones de vehículos eléctricos es simplemente imposible", avisa un informe de Fedea. Tampoco se cumplirá con el desarrollo de la eólica ni del almacenamiento por lo que hay que retrasar el apagón nuclear

Puntos de recarga para vehículos eléctricos
Puntos de recarga para vehículos eléctricos vacíosLa Razón

La escasa electrificación de los hogares y, en especial, del transporte aleja a España del cumplimiento de los objetivos de descarbonización para 2030 contemplados en el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC), en el que se concentra la transición energética hacia fuentes menos contaminantes para el periodo comprendido entre 2021 y 2030.

En concreto, en el sector del transporte, el objetivo de pasar del 10% de cuota de renovables al 28% en 2030 "no parece alcanzable". "Alcanzar estos 5,5 de millones de vehículos electrificados desde los algo más de 500.000 actuales es simplemente imposible", ha asegurado Diego Rodríguez, investigador asociado de la Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea), que ha elaborado el primer número del observatorio sobre el cumplimiento del PNIEC, en ausencia de un comité oficial que monitorice el avance de dicho plan.

Pero si la electrificación del parque automovilístico camina a un ritmo insuficiente, tampoco avanza -incluso retrocede- la previsión de trasvase del transporte de mercancías de la carretera al ferrocarril.

Así, en conjunto, el sector del transporte solo ha cumplido un 11,7% de la previsión de descarbonización prevista para 2030.

Partiendo de la base de que el objetivo es reducir la emisión de gases de efecto invernadero un 32% con respecto a las emisiones de 1990, a 2023 se había logrado reducir un 7,6% las emisiones de esos gases desde 2019, gracias al buen comportamiento del sector eléctrico, especialmente en ese 2023.

"Vamos bien, pero cada año tenemos que reducir las emisiones un 4,5% de forma persistente. Si vemos el histórico, estas reducciones se han producido únicamente con crisis financieras o del Covid. Solo en 2019 y 2023 se produjeron reducciones de ese calibre. En 2019, por la reducción de las emisiones del carbón y en 2023, por la vuelta a la normalidad tras la crisis energética", ha explicado Rodríguez.

La ganancia de eficiencia en la industria y el sector eléctrico han tirado hasta ahora de la reducción de las emisiones, pero en los hogares, sector comercial, sector del refino y el transporte ha habido una "ligerísima" reducción de las emisiones.

Hasta ahora, entre 2019 y 2023, el transporte ha contribuido en un 10,5% a la reducción de emisiones por lo que deberá incrementar al 37,6% su aportación. La reducción de emisiones en los hogares, oficinas y comercios (residencial y comercial) que hasta ahora ha contribuido con un 7% deberá aumentar su peso al 11,7%.

A partir de ahora, el transporte será el que tenga que tomar el relevo de esta reducción y las perspectivas, según recoge el informe, no son muy halagüeñas.

Respecto al peso de los renovables en el consumo final de energía, de todo tipo, el objetivo del 48% para 2030 -que en 2023 estaba en el 24,8%- será imposible sin un vuelco en la electrificación del transporte, que debería triplicar la penetración de fuentes renovables, ha indicado Rodríguez.

El desarrollo de la eólica, inalcanzable

En este sentido, alcanzar en 2030 el 81% de la generación eléctrica con fuentes renovables (el 56,8% en 2024) es un objetivo factible por la fuerte implantación de la fotovoltaica y pese a que el desarrollo de la eólica y la termosolar se queden lejos. "Es inalcanzable cumplir con el objetivo de desarrollo de eólica. Necesitaríamos una entrada de generación anual que estaría muy por encima de la entrada anual desde 2017. Respecto a la entrada de eólica marina, se contempla la entrada de 500 megavatios anuales que de ninguna forma se va a llevar a cabo", ha explicado.

De hecho, Rodríguez rebaja el objetivo de 62 Gigavatios de potencia eólica instalada en 2030 a 45 GW siempre que la repotenciación de los parques existentes avance al ritmo previsto.

Respecto al almacenamiento, clave en el desarrollo de las renovables, está lejos de alcanzar su objetivo. "En bombeo, el único almacenamiento a día de hoy, podemos pasar de 5 GW a 9 GW siendo optimistas. Y en baterías no hay nada y está todo por hacer. Creemos que va a haber un boom en los dos o tres últimos años de esta década. Hay que desarrollar ya el mecanismo de capacidad".

Nuclear: retrasar el cierre

Sobre la nuclear, claramente hay que "flexibilizar el protocolo de cierre". "Hay que adaptarse a las circunstancias reales para, al menos, retrasar hasta el final de la década el cierre de Almaraz. Solo hay que modificar una orden ministerial con otra orden ministerial", ha indicado.

Además, la descarbonización de los sistemas no peninsulares, más cara y compleja, no corre a la misma velocidad que en la Península. De hecho, su peso en las emisiones ganan peso en el sector eléctrico y representan casi un 35% pese a que solo suponen un 5% del sistema eléctrico.

Tampoco se alcanzará el objetivo de desarrollo del hidrógeno verde. El PNIEC contempla 12 GW de electrolizadores en 2030 sobre una base muy optimista del aumento de la demanda eléctrica del 44% entre 2024 y 2030. En biometano y biogás, se contemplan 20 teravatios hora en 2030 y hay 4 TWh. "Se están dando pasos. Ya hay 10 u 11 plantas que están generando, pero aún representan un porcentaje del gas muy pequeño", ha subrayado Rodríguez.