Empleo

Estos son los beneficios de ser autónomo y asalariado al mismo tiempo

La pluriactividad permite a aquellos que la escogen una mayor flexibilidad en las cotizaciones

Un trabajador carga con un carro
Un trabajador carga con un carroDavid JarLa Razón

El trabajo es una actividad que nos acompaña durante toda nuestra vida. Y es que, aunque muchos quieren abandonar el mundo laboral y jubilarse cuánto antes, hasta que llegue ese momento, el trabajador tendrá que ocupar su puesto durante años y años. Por tanto, cotizar en más de un régimen de la Seguridad Social es cada vez más habitual durante la trayectoria profesional de muchos trabajadores en nuestro país. Además, en ocasiones, algunos incluso deciden apostar por la pluriactividad, es decir, ser autónomo y asalariado al mismo tiempo. Combinar un empleo fijo con un negocio propio aunque puede parecer agotador, también conlleva una serie de ventajas que comparten desde TaxScouts.

1. Mayor acceso a prestaciones sociales

La cotización en el Régimen General y en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos no supone tener mayores derechos sociales, Aunque cotizar en ambos regímenes no va a permitir al trabajador cobrar dos prestaciones de incapacidad o una jubilación duplicada, sí que amplia sus posibilidades de acceso a las prestaciones de la Seguridad Social.

La pluriactividad, por ejemplo, permite a aquellos que la escogen una mayor flexibilidad en las cotizaciones. Si "no alcanzas los requisitos mínimos en el RETA para solicitar una baja o una prestación por jubilación, podrás hacerlo en el Régimen General (y viceversa)", aseveran.

2. Acceso a la tarifa plana como autónomo

Aquellos que estén comenzando su actividad como autónomo podrán acceder a la tarifa plana del Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA). La tarifa plana "consiste en el pago de una cuota de 80 euros al mes durante los primeros 12 meses de alta si el autónomo se da de alta por primera vez en trabajo autónomo", tal y como explican desde la web de la Seguridad Social. Además, esta podría ampliarse durante un año más.

Para beneficiarse de esta tarifa, el trabajador no debe haber estado dado de alta como autónomo en los dos años anteriores, además de no tener deudas pendientes con la Seguridad Social. "Esto es especialmente útil si estás empezando con tu negocio y quieres reducir los costes iniciales", sostienen desde TaxScouts.

3. Más ingresos y menor riesgo económico

Contar con un salario fijo a la vez que se desarrolla una actividad por cuenta propia puede aportar al trabajador mayor estabilidad económica y capacidad de ahorro, así como una mayor libertad para arriesgar sin tener la presión de depender exclusivamente de este negocio para llegar a fin de mes.

4. Deducción de gastos como autónomo

La actividad como autónomo permite al trabajador deducirse una serie de gastos relacionados con su negocio como los de alquiler de oficina o espacio de coworking; el dinero que se haya gastado en material de oficina, herramientas o software necesario para su actividad; en transporte –siempre y cuando sea exclusivamente para fines laborales–; en formación específica relacionada con su negocio; así como la parte de los suministros de su hogar si se trabaja desde casa –luz, agua, Internet…–.

"Recuerda conservar siempre las facturas, Hacienda puede pedirte que demuestres la relación de estos gastos con tu actividad profesional", señalan. Estas deducciones podrán reducir la base imponible del autónomo en el IRPF y optimizar su situación fiscal.

5. Flexibilidad para desarrollar proyectos personales

La pluriactividad también permite a los trabajadores probar nuevos proyectos, comprobar si su idea de negocio es viable y, en definitiva, experimentar con diferentes enfoques y nichos sin tener que renunciar a la seguridad económica de un empleo fijo.

No obstante, antes de ello, el asalariado deberá asegurarse de que su contrato no prohíba de forma expresa actividades externas o que no haya conflicto de intereses con su empresa.

6. Deducción del exceso de cotización

Si se cotiza en ambos regímenes y se supera el límite máximo de cotización anual –4.495,50 euros en 2024–, se puede solicitar una devolución parcial del exceso cotizado. La devolución puede alcanzar hasta el 50% del exceso en el RETA y se tramita de manera automática o mediante solicitud. "Es una forma de recuperar parte del dinero invertido en tu cotización", sentencian.