Las tecnológicas, en el punto de mira de Hacienda

Se aumentarán el gravámen del gasóleo y se reducirá el IVA en los productos de higiene femenina.

Uber y Cabify recibieron ayer un nuevo varapalo del Gobierno, que podría ser ya la puntilla a este tipo de plataformas de transporte. Tras el «decretazo» de la semana pasada de Fomento, que abre la puerta a suprimir el 80% de las licencias VTC, ahora han entrado en el radar del Ministerio de Hacienda. La ministra María Jesús Montero ha asegurado en el Senado que su intención es aumentar la presión fiscal sobre las aplicaciones de economía colaborativa en alojamiento y transporte, como Uber, Cabify y Airbnb. «Hay plataformas dedicadas a esta actividad que generan miles de millones de euros y no tributan de manera adecuada, porque la fiscalidad actual no reconoce este tipo de actividad y además entran en competencia desleal con sectores tradicionales», dijo Montero durante su comparecencia en la Comisión de Hacienda de la Cámara Alta, donde explicó las líneas maestras que regirán su Ministerio.

Este nuevo impuesto gravará con un 3% las transacciones comerciales entre estas empresas y los particulares, la venta de datos de sus clientes y los ingresos por publicidad. Además, afectará no sólo a estas plataformas, sino también a las grandes empresas tecnológicas como Amazon. En concreto, se destinará a compañías con una facturación mundial superior a los 750 millones de euros o a 3 millones de euros en España. No obstante, la ministra señaló que al tratarse de un tributo de nuevo cuño no se implementará directamente con los Presupuestos Generales del Estado de 2019, sino que se hará aparte en forma de proposición de ley. Esta será también la fórmula elegida para poner en marcha un impuesto a las transacciones financieras. La tramitación de estos dos impuestos empezará «antes o a la par» que la de los

Presupuestos, dijo Montero.