Fin de semana
"Nobu Marbella está ahora como en verano"
El emblemático hotel dispone de la oferta más exclusiva y de nuevas sorpresas para los próximos meses. "No estamos al alcance de todos, pero una pareja se puede dar el capricho", asegura Álvaro Sánchez, su manager
Nobu Hoteles es el lujo entre sábanas y manteles, una cadena en pleno crecimiento que nació sobre una apuesta gastronómica única creada por el súperchef nipón Nobu Matsuhisa en comunión con el oscarizado Robert De Niro y el productor de cine Meir Teper. Los tres juntos crearon un lugar de encuentro de amantes del descanso, de la diversión, el deporte, los placeres mundanos y, por supuesto, del gusto culinario. Añadan la marca Marbella a la coctelera y tienen un lugar único en el que sentirse mejor que en casa. Esa es la idea.
¿Qué diferencia Nobu Marbella de otros hoteles de lujo de la zona?
Nobu se enfoca en un espacio divertido. Hay grandes hoteles asentados en Marbella, con mucha solera, pero en algunos no interactúas con la gente de la zona. Nobu está en áreas que son el epicentro de la vida social de Marbella. En Nobu eres parte de la vida del hotel. Hablamos de un espacio único en el que no eres un simple turista.
¿Cuál es la filosofía detrás de la marca Nobu y cómo se refleja en la experiencia que ofrece el hotel?
Nobu nace de los restaurantes, de un chef japonés muy famoso en los años 80 en Estados Unidos. Desde esos 30 años de experiencia en la restauración de gama alta, en 2012 salta a la industria hotelera. La diferencia de Nobu es que es el primer grupo que nace desde la raíz de un restaurante, en el que la oferta gastronómica es lo primero. Pero, además, incorpora los valores de la marca, los procedimientos y estándares de calidad. Por ejemplo, cuando te alojas en el hotel y pides comida al “room service” se sirve desde el restaurante.
¿Se ha recuperado ya toda la clientela previa a las restricciones?
La temporada de verano ha sido muy buena, aunque Nobu está a tope todo el año. Ahora, en los meses otoñales y invierno, conservamos una alta ocupación. Tenemos 101 habitaciones y suites con una clientela muy fiel de Estados Unidos, Reino Unido y del resto de Europa, con una media anual del 80%-85%, aunque desde mayo a octubre nos faltan habitaciones. Pero Nobu no se para por el cambio de temporada. Tenemos las piscinas climatizadas aunque hay días en los que ni siquiera hace falta y un spa fantástico de Six Senses con todo tipo de tratamientos de belleza, conciertos, club de tenis y toda la oferta de golf de la zona.
Aprovechando el otoño, ¿se puede dar un capricho uno en Nobu?
Los precios fluctúan al alcance de todo el mundo, claro que baja la tarifa. Somos un hotel que juega en una liga de alto nivel que no se pueden permitir todos los bolsillos, pero una pareja que quiera darse el capricho puede hacerlo, porque en los meses menos cálidos todo está abierto, no cerramos nada respecto al verano.
¿Siguen llegando árabes con la competencia de los países del Golfo y ahora de la propia Arabia?
Nuestra clientela es particularmente norteamericana, británica y española. Luego hay un 20%-25% de países más próximos, como Francia, Portugal y los países escandinavos. Los árabes nunca fueron el principal mercado. Claro que tenemos huéspedes de los Emiratos, de Catar y Dubái, son un mercado que se mantiene estable.
¿Cuáles son los principales desafíos y oportunidades en la industria hotelera en Marbella y cómo se están abordando en Nobu Marbella?
Como destino, la estacionalidad. Aunque por suerte tenemos demanda, es un desafío. Necesitamos que siga habiendo conexiones directas. A partir de septiembre-octubre nos quitan un vuelo de los tres que unen Málaga con Nueva York. Los estadounidenses son muy importantes porque están muy familiarizados con Nobu y en EE UU es superfamoso. A eso le sumas el hecho de que Marbella es conocida en todo el mundo.
¿Qué consejos daría a los viajeros para tener la mejor experiencia en Nobu Marbella?
Que se queden 4 o 5 noches, que no sea una visita relámpago, que disfruten la zona y del destino para que podamos personalizar la estancia. Que nos indiquen si nos visitan por una celebración especial, para hacer la estancia más especial. Y, desde luego, probar el restaurante.
¿Cuáles son los proyectos o innovaciones futuras que tiene el hotel para continuar ofreciendo experiencias excepcionales a los huéspedes?
En febrero agrandamos el hotel y ahí nos vamos a quedar. Para el año que viene incorporaremos un restaurante “mini-Nobu” en la playa, en las piscinas. Hasta ahora, el restaurante solo abre por las noches y hay un menú reducido en la piscina, “Nobu by the beach”. Lo tendremos para Semana Santa. Otro reto es la sostenibilidad. Pretendemos suprimir a finales de 2023 los plásticos de un solo uso y agrandar el año que viene el huerto que tenemos cerca para nutrir a todos los restaurantes con productos cultivados de forma sostenible a menos de 4 kilómetros del hotel.
¿Qué porcentaje de ingresos proviene de servicios adicionales como, por ejemplo, el restaurante Nobu?
Desde luego factura más el restaurante Nobu que un restaurante de firma de cualquier otro hotel de superlujo.
¿Qué tenéis preparado para los próximos meses?
Están ya disponibles los paquetes especiales de Nochevieja. Además, hay un club de niños con actividades especiales de Nobu, como experiencias como sushi chefs o visitas al huerto para experimentar y que los más pequeños disfruten de trabajar con sus manos la tierra.
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