Empleo

Un tercio de los trabajadores acepta regularmente condiciones laborales que no son legales

El 22% tiene temor a represalias si se afilia a un sindicato y casi la mitad no cree tener capacidad de negociación

Camarero en una terraza
Camarero en una terraza de MadridJesús G. FeriaLa Razón

Un tercio de los trabajadores en España asegura que regularmente acepta condiciones en su puesto de trabajo que sabe que no son legales o reglamentarias y que sus condiciones laborales son impuestas, según un estudio realizado y presentado este lunes por Comisiones Obreras (CC OO) y la Fundación Primero de Mayo.

Sobre una base de 1.599 personas, la encuesta conjunta muestra también que la mitad de las personas (49%) trabajadoras considera que no tiene capacidad de negociación de sus condiciones laborales y un quinto de la población asalariada (22%) tiene temor a represalias si se afilia a un sindicato o considera que no se respetan los derechos laborales (20,8%).

El secretario general de CC OO, Unai Sordo, ha tachado de "escándalo" que en España se tenga miedo por las represalias a formar parte de un sindicato y ha lamentado que esta sea una "realidad mayoritaria", que tiene que ver con la "forma de entender la empresa" en España.

Respecto a las condiciones del puesto de trabajo, una parte significativa de los trabajadores considera que no disfruta de oportunidades de promoción (34,8%), sufre largas jornadas (32,2%) o les obliga a vivir lejos de sus familias y amistades (16,9%).

Por géneros, las mujeres asalariadas sufren peores condiciones en el puesto de trabajo y disfrutan de menores derechos laborales que los hombres, especialmente, en lo que se refiere a tiempo de trabajo, ya que sufren en mayor medida jornadas especialmente largas y tienen menor capacidad de negociación.

Asimismo, los jóvenes son los que tienen menores expectativas en lo que respecta a sus derechos laborales, y hasta un 23,5% de los menores de 35 años asegura que sus condiciones laborales le son impuestas, sin que puedan negociarlas.

Pese a estar más expuestos a la arbitrariedad, el 42,7% de los menores de 35 años asevera que sus derechos laborales le son respetados, es decir, tienen una mayor percepción, frente al 38,8% de los mayores de 35 años.

La falta de ingresos y el subempleo, principales problemas

Un 28,1% de las personas trabajadoras considera que no tiene suficientes ingresos, mientras que un 23,7% se encuentra en situación de desempleo, es decir, dice trabajar menos horas de las que desearía.

Estos son señalados por los encuestados como los mayores problemas respecto a las condiciones laborales. Otro problema es el temor a perder el empleo o a que la empresa se vea afectada por una reestructuración laboral, algo que comparte más de un quinto de las personas entrevistadas.

Las personas jóvenes y las mujeres son las que padecen estas peores condiciones de trabajo. En el caso de las mujeres, sufren más en lo relativo al subempleo, estabilidad contractual y temor a perder el empleo; mientras que en los jóvenes, las diferencias son más marcadas y destaca sobre todo la vulnerabilidad a los cambios de ocupación y el temor a la reestructuración reproductiva, a perder el trabajo o a ver reducida la jornada.

En el estudio también se pone de manifiesto que los trabajadores con contratos fijos discontinuos perciben su situación laboral de forma similar en cuanto a la precariedad que tienen los trabajadores con contratos temporales, aunque la percepción de seguridad en torno al mantenimiento del trabajo es mayor en términos generales (65,5%).

En lo que respecta al bienestar laboral, un 55% de las personas se encuentra satisfecha con su bienestar laboral, pero un 55,3% afirma que su trabajo le hace sentir agotados mental y emocionalmente, y a un 44,3% le provoca estados de ánimo como tristeza, irritabilidad, tensión y nerviosismo.

La negociación colectiva es vista positivamente por la mayoría

Una de las conclusiones más destacables a las que llega el estudio es que la negociación colectiva es percibida de manera "positiva" por la mayoría de los trabajadores, en concreto, en lo que se refiere a la contribución positiva que hace a la igualdad de género (54,7%), a la seguridad y salud laboral (53,3%) y a la mejora de las condiciones laborales, en general, (52,3%).

Para Unai Sordo, este estudio muestra la importancia de la negociación colectiva en el país, ya que, más allá de la revalorización salarial --que ha sido valorada positivamente por el 31,9% de los encuestados--, la encuesta muestra la importancia que dan los trabajadores a cuestiones más sociales.

Por otro lado, también ha puesto en valor el modelo sindical español, ya que, en su opinión, permite que los acuerdos alcanzados en el marco de la negociación colectiva se "apliquen" a todos los trabajadores, "estén o no en una organización sindical".

No obstante, el sindicalista ha hecho crítica en lo que respecta a la opinión de los trabajadores de los sindicatos, especialmente en lo que se refiere a la implicación de los trabajadores en las negociaciones colectivas o la laboral informativa de los sindicatos. "Evidentemente el margen de mejora en los procesos de negociación colectiva no es menor", ha indicado.

Pese a ello, desde CC OO y la Fundación Primero de Mayo consideran que el estudio "refuerza" la idea de que los trabajadores perciben que el rendimiento laboral depende del bienestar laboral y de los bajos niveles de precariedad laboral, lo que se vincula directamente con la negociación colectiva, por lo que se "contrarresta" la idea de que una empresa es productiva a través de la degradación de las condiciones de trabajo.