Coronavirus

El Gobierno pretende prorrogar hasta junio el estado de alarma

El Gobierno carga contra los padres y advierte de que no «se pueden producir abusos». Hoy el Congreso debatirá la fecha para acordar la nueva prórroga la próxima semana

El Gobierno no plantea dar por finalizado el estado de alarma en un horizonte cortoplacista. Este escenario es el que ya se debate en Moncloa después de que el domingo se produjeran imágenes por toda España de padres sin respetar las normas de distanciamiento. El Ejecutivo califica de «minoría» estas actuaciones pero, carga contra los padres adviertiendo de que no se pueden cometer «más abusos». «Cualquier error va a tener un coste en vidas humanas», advirtió el ministro del Interior. Es decir, que, existe preocupación ante la relajación de medidas de confinamiento recién tomadas.

Hasta ahora, los datos diarios confirman que nos adentramos en la nueva etapa de transición hacia la nueva normalidad desde el inicio del confinamiento en España el pasado 14 de marzo y las medidas de alivio, si no se observan rebrotes, continuarán sucediéndose en el tiempo. Sin embargo, el Ejecutivo trabaja ya con el escenario de alargar el estado de alarma hasta el mes de junio, las medidas extraordinarias no se desactivarán hasta que el virus no se esté totalmente controlado.

El Gobierno pretende prorrogar hasta junio el estado de alarma
El Gobierno pretende prorrogar hasta junio el estado de alarmaTania Nieto

El decreto de alarma es la herramienta segura con la que el Gobierno puede contar para iniciar la esperada desescalada, un escenario que no se contempla efectivo si el real decreto del 14 de marzo no sigue vigente, pues durante el tiempo que se encuentre activo, el Gobierno sigue teniendo las competencias exclusivas para dirigir el proceso en coordinación con las comunidades.

El propio ministro de Sanidad, Salvador Illa, ya aseguró este fin de semana que es «muy precipitado pensar que el estado de alarma va a acabar en quince días». El pasado sábado el BOE publicó la tercera prórroga hasta el 10 de mayo. La cuarta implicaría que el Gobierno continuaría teniendo intactas las competencias de mando único hasta, al menos el 24 de mayo. Nos acercaríamos entonces a los 70 días de confinamiento, a pesar de que los sucesivos estados de alarma se prevén enfocados hacia esa desescalada y, por tanto, con menos restricciones.

El presidente del Gobierno alertó este sábado de que la desescalada se iniciará «en la segunda mitad de mayo» y no descartó el mes de junio para continuar con su desarrollo. Esa normalización constaría de dos fases, la primera durante el mes de junio y otra que, según el estado de la reproducción del virus, podría prolongarse hasta otoño-invierno. En la primera etapa se prevé que los movimientos continuén estando limitados y controlados, y sería en la segunda fase cuando se podría registrar un grado de apertura mayor.

Durante este tiempo, el Gobierno irá modulando las características del estado de alarma, siempre si los datos así lo corroboran. Sánchez de hecho ya ha advertido de que, a pesar de que se puedan iniciar pasos hacia el desconfinamiento, no dudará en dar «un paso atrás», si las circunstancias lo precisan. En Moncloa valoran que el virus no es una enfermedad estática, por tanto la precaución es la máxima con la que trabajan.

El desconfinamiento puede llegar pronto, acompañado de medidas encaminadas a sumergirnos en esa nueva normalidad pero bajo la prórroga del estado de alarma. El Gobierno ya ha dado pasos en ese sentido, primero tras dejar que los trabajadores no esenciales pudieran volver a sus trabajos. Hasta ahora, no se han producido rebrotes, tras tomar la decisión, sin embargo preocupa que pueda volver a acelerarse la reproducción del virus. Este domingo, se permitía a los menores de 14 años salir a la calle. Llegará el próximo 2 de mayo un nuevo alivio para que los adultos puedan practicar deporte en la calle. Los próximos pasos irán dirigidos a la tercera edad.

Será hoy cuando, la Junta de Portavoces fije el pleno en el Congreso donde Sánchez deberá recibir el aval para prorrogar la alarma. Lo hará ante un Congreso cada vez más crítico y con el apoyo dividido entre sus socios.