Vox

Rocío Monasterio: “Cada piedra que nos lanzan es un incentivo para luchar por la libertad”

La líder de Vox en la Comunidad de Madrid y diputada regional asegura que "Sánchez es socio de aquellos que pegaban el tiro en la nuca a los que defendían la libertad. No podemos ir con él a ningún lado"

En plena campaña de las elecciones autonómicas gallegas y vascas que tendrán lugar el día 12, Vox se ha enfrentado al acoso de los radicales que tratan de boicotear sus actos. A pesar de ello, la líder del partido en Madrid asegura que su formación no tiene miedo, que no les van a callar y se muestra convencida de que podrán entrar en ambos parlamentos.

También carga contra Sánchez y aquellos que ha convertido como negociadores imprescindibles –Bildu– y repasa cómo las políticas del Gobierno de Sánchez también tratan de esparcirse en la Comunidad de Madrid.

–¿Se enfrentan a una campaña de acoso y boicot en el País Vasco? ¿Hay libertad?

–La campaña en el País Vasco para mí es muy ilusionante, porque es la lucha por la libertad de todos los españoles que en el País Vasco parece que no tienen derecho a hablar. Cada vez que nos lanzan una pedrada a un diputado nuestro es un incentivo más para ir a defender la libertad. Yo estaré el viernes y el sábado en Bilbao y el domingo en Vitoria, porque creo que es importantísimo estar y hacer frente a los totalitarios, y mirarlos a los ojos y decirles que no les vamos a permitir hacerse con el País Vasco y excluir a los que no defienden su plan. No vamos a permitir que echen a la gente que defiende a la libertad, que se siente orgullosa de su bandera. No hay normalidad en el País Vasco y la prueba es lo que pasa cuando nosotros vamos a nuestros mítines.

–¿Por qué cree que dirigen ese acoso contra Vox?

–Porque Vox es el que dice las cosas con valentía, que no se permite el compadreo con Bildu mientras otros se hacen amigos de la peluquera de Bildu y por tanto ya no pueden hablar de todo esto. Yo nunca me llevaría bien con una peluquera de Bildu.

–¿Quién es amigo de la peluquera de Bildu?

–El senador del PP, Javier Maroto, que se hace amigo de la peluquera de Bildu, o Teodoro García Egea se va de reuniones con Zapatero... ¿Qué está pasando aquí? A mí no me van a ver nunca en una reunión con Zapatero, ni ser amiga de la peluquera de Bildu.

–Vox ha responsabilizado a Urkullu y Sánchez de ese acoso. ¿Lo ve así?

–Por supuesto que sí. En Sestao, si la orden hubiera sido que se disolviera la manifestación ilegal que nos estaba acosando, la Ertzainta lo hubiera hecho. La orden fue no disolver y fue solo hacer un cordón. Tengo que agradecer a los ertzainas su papel, que fue dificilísimo. Fue contener a los totalitarios, que no lincharan a la gente de Vox en esa plaza, y no poder disolverlos; y esas son órdenes políticas del PNV que quiere que tengamos miedo, que no vayamos al País Vasco, que renunciemos. Pero es que están muy equivocados. A lo mejor es que están acostumbrados al PP, pero Vox es otra cosa. También es muy triste que Sánchez no haya sido capaz de poner ni un mísero tuit de condena por la agresión a una diputada.

–Echenique se burló de la agresión a de su diputada, diciendo que era «ketchup». ¿Qué le parece?

–Hay una parte de la política, como es el caso de Echenique, en la que solo veo odio y me parece terrible. Como yo no odio a nadie, me parece terrible. Se pueden tener ideas distintas respetando, al contrario, pero sin caer en el sectarismo ni la violencia de la izquierda radical.

–Denunciaron el «secuestro» de los sobres electorales de Vox –aunque la Junta Electoral ayer ya les ha dado la razón». ¿Su campaña es una provocación?

–No, la campaña de Vox siempre dice la verdad y entiendo que estos días decir la verdad es revolucionario y por eso Vox es revolucionario.

–En Galicia, ¿su partido tiene alguna manía personal contra Feijóo?

–Vox no tiene ninguna manía personal contra nadie más que con los nacionalismos excluyentes o con aquellos que al final, por intentar hacer una política propia de cacique, acaban adoptando gestos del nacionalismo excluyente.

–¿La mayoría de Galicia puede peligrar por el nacionalismo o por la entrada de Vox o Cs?

–Vox tiene posibilidades de entrar y lo que hay que entender es qué significa para Galicia la mayoría de Feijóo. Los gallegos esperan que les hablen de no utilizar la lengua como la utilizan los nacionalistas, un partido que hable de la igualdad de todos los españoles en toda España, de una educación para todos igual, de cómo recuperar la industria. Los gallegos se quieren quedar en donde viven, no quieren tener que cambiar de autonomía porque desmantelan su industria. Les están dejando en Galicia sin su modo de vida. Ahora es Alcoa, pero ha habido muchas más. Ahora mismo solo Vox tiene un proyecto para toda España.

–En la comisión de reconstrucción del Congreso su partido no participa en las conclusiones y en la de Madrid se han posicionado en contra. ¿Esperan algo de la reconstrucción?

–La comisión de la reconstrucción de la Comunidad de Madrid la propone el PSOE de Sánchez. Nosotros no creemos que el PSOE de Sánchez, que nos ha llevado a este desastre y negligencia en la gestión del coronavirus pueda liderar ninguna reconstrucción. ¿Cómo vamos a permitirle reconstruir a quien lo está destruyendo todo? Ya estamos viendo lo que pasa con los ERTE, no encarando la crisis económica, anticipando la posible crisis social... Con Sánchez no se puede ir a ningún sitio. Y no entiendo que Ayuso se haya plegado al PSOE y haya permitido que salga adelante una comisión liderada por ellos. Nosotros votamos en contra y no vamos a estar ahí. Nosotros lo que queremos es sacar a Sánchez del Gobierno, no consolidarlo.

–¿El virus ha terminado teniendo ideología?

–Creo que el virus tiene dos partes: una gestión técnica, en la que hay que tener equipos técnicos buenos para gestionar. Y en la salida y en la defensa de la libertad, sí que hay ideología; en no utilizar un estado de alarma para algo que nada tiene que ver con ello, mientras aprobaba y aprovechaba una serie de medidas que nada tenían que ver con el virus: echar a los mandos de la Guardia Civil, derogar a la reforma laboral que es fundamental para crear futuro en España, crear leyes ideológicas con otras de ideología de género. Han aprovechado el virus para poder avanzar en su doctrina totalitaria. Tenemos que entender que la izquierda radical aprovecha los momentos de debilidad de un pueblo para implantar su ideología. Por eso nosotros no vamos con Sánchez a ningún sitio.

–¿Barajas se puede convertir en el próximo 8-M?

–No se puede convertir en el próximo 8-M porque hubo sectarismo e ideología. Porque teniendo el Gobierno toda la información, no canceló los actos que tenía que haber cancelado. Lo que pasa en Barajas es más propio por incompetencia; y si Sánchez no toma medidas en Barajas, la Comunidad de Madrid tiene que hacerlo por ejemplo en el metro que va de Barajas a Nuevos Ministerios, haciendo PCR y en los peajes. Eso es competencia de la Comunidad de Madrid. Hay un momento en el que hay que actuar y no se pueden limitar a culpar a Sánchez y hay que tomar decisiones. Se tiene que detectar, hacer PCR y detectar contagiadores. No podemos permitir que estén entrando vuelos a Madrid sin ningún tipo de control.

–En el «caso Dina» han denunciado a Iglesias, Bousselham, Marta Flor y hasta al fiscal Stampa...

–Cualquier otro Gobierno que estuviera implicado, donde a los fiscales se les está sacando información, donde se está además presentando al vicepresidente como una víctima; cuando no lo era, se está interfiriendo en nuestro Estado de Derecho... Sería un escándalo que haría dimitir y caer a un vicepresidente del Gobierno. Sin embargo, aquí parece que, en vez de estar denunciando al vicepresidente Iglesias estamos pensando en pactar con Sánchez que no dice nada de su vicepresidente. ¿Qué pacto de reconstrucción va a cerrar el PP con el Gobierno de Sánchez y de Iglesias, con el Ejecutivo que interviene en la fiscalía?

Ahora entenderán que Vox no quiera estar ahí de ninguna manera...

–Ustedes han dicho que no van a negociar nada con los de Sánchez, ¿es mejor que los Presupuestos salgan con la ayuda de otros?

–Realmente Sánchez acabará pactando con todos, pero en diferido, para no ser incompatibles. Pospone los temas farragosos para que pueda votar con el PP y se aplazan los otros como la mesa de diálogo que luego llevará a término. Al final, el PP acaba siendo socio en diferido de los independentistas. Yo espero que no lo haga.

–¿Ustedes se fían de Cs?

–Yo creo que de Ciudadanos nunca sabes si te puedes fiar, porque no sabes lo que defienden. Por eso nunca me he llevado una decepción. Puedes llegar a tener tantas opiniones como miembros estén ahí sentados.

¿Ve en riesgo el Gobierno de la Comunidad de Madrid?

–Creo que si se consigue tener una sola voz de los partidos que están en el gobierno puede seguir hasta el final de la legislatura. Nosotros estamos para dar esa estabilidad, pero si se pliega a lo que quiere el PSOE de Sánchez, que no espere que le vayan a respetar, sino que se le pierda ese respeto y le hagan una moción de censura. Con la izquierda no podemos ir a ningún sitio, porque ya sabemos cómo funciona y la prioridad ahora mismo es sacar a Sánchez del Gobierno. Además, Sánchez tiene un plan clarísimo de acabar con toda la Transición y el armazón que en ésta nos hemos dado; y por eso tiene de socios a ERC y a Podemos, que tenemos claro lo que quiere, que es destruir a España. Aunque haga pactos en diferido, a Vox no le va a engañar. De momento sabemos que Sánchez es socio de Bildu, el que defiende a los que antes disparaban a la nuca por defender la libertad y España. Nosotros no podemos ir con Sánchez a ningún lado y espero que el PP esté en esa posición también.

–¿Le ha pedido Ayuso su apoyo para evitar una moción de censura?

–A mí no me hace falta que me pidan el apoyo para hacer frente a la izquierda. Yo hago frente a la izquierda por convicción, no hace falta que nadie me lo pida, pero hay que hacerlo con contundencia.