Agreden a la diputada de Vox, Rocío de Meer, en el mitin de Abascal en Sestao

La localidad vizcaína de Sestao amaneció con pintadas y dianas amenazantes tanto a Vox como a su líder, Santiago Abascal. Por la tarde, los radicales esperaban ya a los miembros de Vox para intentar impedir que se llevara a cabo el mitin de campaña que el partido dio con motivo de los comicios a las elecciones vascas del próximo 12 de julio.

Abascal presidió e intervino en el acto electoral que se ha desarrollado entre cargas de los agentes antidisturbios de la Ertzaintza mientras radicales proetarras y grupos antifascistas les arrojaban botes de humo, botellas, y piedras una de los cuales alcanzó a la diputada de Vox, Rocío de Meer causándole una brecha en la ceja.

El acto electoral se inició a las 19:45 horas, un cuarto de hora antes de lo previsto, en la plaza de San Pedro de la localidad vizcaína, protegida con un amplio despliegue policial integrado por alrededor de un centenar de agentes antidisturbios. Sin embargo, a pocos minutos de que dieran las nueve, la caravana de Vox seguía sin poder abandonar la plaza en la que se concentraban los violentos que rodeaban también a los simpatizantes del partido.

El líder de Vox criticó enérgicamente lo ocurrido y responsabilizó de ello al PNV por haber “permitido un acto de hostigamiento a quienes queríamos ejercer nuestros derechos políticos”. Criticó, mientras los radicales le increpaban, que no se hubiera impedido “que esta manifestación ilegal se desarrollase y que tiraran piedras” alcanzando una de ellas a la diputada Rocío de Meer.

Abascal denunció que “la policía autonómica no ha disuelto este acto de hostigamiento y proterrorista contra nosotros”. Además, arremetió contra los medios que aún se atreven a calificarlos como “ultraderecha” y advirtió de queVox no se va a quedar quieto garantizandoque “actuaremos contra el jefe del dispositivo y contra la consejera de Interior del Gobierno vasco”. El partido subrayó desde su cuenta de Twitter: “¡El gobierno vasco es cómplice absoluto de estos actos!” y apuntó a los " cachorros de Urkullu, Otegi e Iglesias que “amenazan de muerte a Santiago Abascal y agreden a nuestra diputada”.

A pesar de las amenazas e insultos el líder de Vox aseguró que “no vamos a dar un paso atrás” y recordó que hay 300 personas que les han votado en esa localidad; que el mitin no era un acto de provocación sino un acto “legítimo para representar los derechos políticos de quienes viven en Sestao y nos han apoyado”, y garantizó que van a estar ahí, donde haya un vasco que haya confiado en Vox para decirle que no está solo.

Mientras, varios centenares de personas seguían concentradas en la plaza con la idea de silenciar la voz de Vox y su líder, con bocinas, pitos e insultos, pero el líder del partido pronunció su discurso. Los radicales exhibieron banderas reclamando el fin de la dispersión de los presos de ETA mientras se enfrentaban al dispositivo de la Ertzaintza.

Abascal, respondió a los insultos de los radicales fumándose un puro.

Vox había pedido antes de la campaña que los partidos se adhirieran a un manifiesto para garantizar que los comicios y la campaña se podía celebrar en libertad. Indicó entonces que, quien no lo hiciera sería de alguna manera “cómplice moral”.