Investigación

Villarejo amenazó con implicar a Felipe VI en las causas de su padre

El comisario jubilado trató de convencer a Corinna Larsen para que intimidara al exdirector del CNI Félix Sanz Roldán con revelar datos privados del actual monarca

Salida de la prisión de Estremera del comisario Villarejo
Salida de la prisión de Estremera del comisario VillarejoLuis DíazLa Razón

«Agradezco al señor [Félix] Sanz Roldán este tiempo de meditación que me ha dado porque, en fin, me ha ayudado mucho a reflexionar, la verdad es que el gran ‘lord’ protector de la Corona, creo que no ha sido muy habilidoso a la hora de proteger a su señor», aseguró José Manuel Villarejo a los periodistas un día después de salir de la cárcel. De esta forma el comisario jubilado señalaba el pasado jueves al ex director del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Sanz Roldán y a Don Juan Carlos I, quien tras conocerse las grabaciones que hizo a Corinna Larsen ha afrontado diferentes problemas con la Justicia. En concreto, está siendo investigado por las fiscalías suiza y española. Y para evitar ser acusado de delitos fiscales el emérito se ha visto obligado a pagar más de 5 millones de euros para regularizar su situación con Hacienda.

Pero una grabación realizada por el propio Villarejo el 19 de febrero de 2017, descubierta por la Policía, pone de manifiesto que el comisario también quiso implicar en los hechos al Rey Felipe VI. En una conversación con el abogado Javier Iglesias, al que llama «El Largo», le informó de que había hablado con la examante del Rey emérito Corinna Larsen para utilizar en su beneficio datos privados del actual jefe del Estado español: «Yo lo único que he hecho ha sido convencerla. Tiene todos los correos, que yo tengo también una copia, a Juan Carlos en 2004 sobre Nóos y las respuestas de éste, todas las sociedades de Juan Carlos I y las vinculadas con Félix Sanz y todas...eh para amenazarle», confesó Villarejo, que inmediatamente después dijo a su interlocutor: «Del Rey Felipe. Claro, paga un millón de euros… cuesta el viaje de novios. A través de una sociedad que la maneja el CNI».

Esta información no vio la luz hasta el 20 de junio de 2020, fecha en la que el diario británico «The Telegraph» publicó que el empresario catalán Josep Cusí había pagado 240.000 euros del total de 418.000 euros que había costado el viaje de novios del entonces Príncipe Felipe y Doña Letizia. Precisamente este rotativo británico fue el elegido por Corinna Larsen para conceder una entrevista en la que aseguró, sin aportar ninguna prueba, que toda la Familia Real se había beneficiado del dinero del emérito.

“Caso Kitchen”

En este sentido, el ex director adjunto operativo de la Policía Eugenio Pino en su declaración como investigado en el «caso Kitchen», celebrada el 14 de diciembre de 2020, explicó que tras saber que el comisario había grabado a Corinna Larsen, avisó al propio Sanz Roldán de los hechos. Y según su testimonio, aconsejó al jefe del espionaje español que no se las requisara a Villarejo porque este guardaba varios audios: «Yo creo que tiene las cintas preparadas, no entre ahí porque tiene varias copias y las va a soltar por todo el mundo», relató Pino sobre su conversación con Sanz Roldán, a quien atribuyó «el mando del blindaje del Rey».

Villarejo, quien aseguró en la conversación grabada con Iglesias que tenía un poder verbal para actuar en representación de Corinna Larsen, completó que sabía que «el emérito le pidió al emir de Catar que le pusiera una casa de 80 millones de libras en Londres a su nombre», que después vendió a «un Príncipe saudí. Y le están trayendo la pasta en maletines, entonces toda esa operación, como no se fían de nadie, se la han encargado a ella [Corinna Larsen]», dijo.

Esta grabación muestra también cómo el mando policial jubilado trató de trasladar estas y otras informaciones al entorno de Mariano Rajoy. Villarejo le dio esta información al abogado Iglesias porque le atribuía una estrecha amistad con el expresidente del Gobierno.

Marcelino Martín-Blas

Con esta conversación, de 19 de febrero de 2020, Villarejo pretendía trasladar al Gobierno que debían frenar al director del CNI, quien según la conversación transcrita por los agentes de Asuntos Internos de la Policía se había reunido con el entonces fiscal general del Estado, José Manuel Maza, para advertirle de las actividades presuntamente ilegales de Villarejo. Además de apartar a Sanz Roldán, el comisario pretendía que se cerrara una investigación que desarrollaba el comisario principal Marcelino Martín-Blas por la filtración de una grabación a miembros del Centro Nacional de Inteligencia.

Y para lograr su objetivo, Villarejo advirtió al que consideraba amigo de Rajoy: «Yo, si a partir de la semana que viene no me ha llamado ni el ministro, ni el secretario de Estado, ni han parado toda la historia, y sigue la historia del acoso del mierda éste, empiezo a repartir leña; y no te puedes ni imaginar la que tengo, ¡y toda documentada!», dice Villarejo a Javier Iglesias.

«Más de una institución se va a tomar por culo», prosiguió el comisario, que concluyó: «Y yo te puedo asegurar que con lo que tengo hay elecciones, el asturiano [nombre en clave de Mariano Rajoy] tiene que, tiene que... ¿entiendes?», balbucea Villarejo, que finaliza: «Bueno, te quiero decir que tú eso, transmítelo».

“El escondite de Bárcenas”

En la conversación el comisario también informó al abogado de que estaba al tanto de las actividades que desarrolló «el cocinero» Sergio Ríos, el exchófer de Luis Bárcenas. Llegó incluso a advertir que sabía “lo que había en el escondite del extesorero del PP: hay cosas muy duras», apuntó.

Asimismo, le anunció que tanto el ex director adjunto de la Policía Eugenio Pino como el ex secretario de Estado Francisco Martínez podían hablar de la «Kitchen» y que si se veían implicados tirarían «para arriba, porque [Martínez] le daba todas las novedades al asturiano [Mariano Rajoy]».

Villarejo aseguró que tenía más información sobre el espionaje a Bárcenas, sobre el que consideraba que estaba al tanto Rajoy: «Lo que encontramos en la ‘Operación Cocinero’. Yo no entré, yo no entré, pero entró ‘el Gordo’ [el comisario Enrique García Castaño] con su gente. Yo no sé la copia de lo que trincó «el Gordo» eh, y si se la dio a ellos».

“Grabaciones del ‘Barbas”

El comisario, amigo de García Castaño, completó que entre los documentos robados al ex tesorero del PP había grabaciones del «Barbas’ con Bárcenas y había mensajes de.... muchos, con toda la gente y preparando estrategias».

«Tiene que pensar que si él le tiene cogido por los huevos, yo le puedo complicar la vida también eh, por lo tanto, no sea que diga, macho a este tío déjalo en paz o vamos a duelo, a diez tiros lo que sea (ininteligible) yo, he traído una nota», concluyó Villarejo que de esta forma incluía a Felipe VI en sus amenazas a Rajoy.

El exjefe de la Policía prohibió las pesquisas

«Cuando el señor José Manuel Villarejo me contó que su despacho de abogados había recibido una serie de informaciones sobre una princesa [Corinna Larsen] muy mediática y así evitamos el nombre, automáticamente le dije que eso no lo podía llevar él y le ordené, mediante un escrito, le prohibí cualquier tipo de investigación porque los hechos se habían cometido fuera del territorio, allí había una Policía y una Justicia democráticas, la persona a la que se investigaba era aforado, y se lo prohibí», dijo el entonces director adjunto de la Policía, Eugenio Pino, en su declaración de 14 de diciembre de 2020, adelantada por el diario digital ‘Vozpópuli’.
Según este mando, que está imputado en el “caso Kitchen” por el espionaje a Luis Bárcenas, «Villarejo lo que pretendía era realizar una investigación con el apoyo de la Dirección General de la Policía». Pino aseguró que llamó al segundo jefe de seguridad de la Casa del Rey, «que es un comisario principal y le dije que comunicara eso a la superioridad». También se reunió con el general Félix Sanz Roldán, a quien le aseguró que salía en las conversaciones grabadas por Villarejo a Corinna Larsen.