La “gran movilización” de la Guardia Civil: 3.000 agentes se manifiestan para pedir dignidad laboral

Están cansados de escuchar lo bien que trabajan y lo necesaria que es su labor para la sociedad pero, a la hora de valorarlo de verdad, todo quede en papel mojado. Para muchos guardias civiles una mejora en las condiciones laborales no es solo hablar del tema económico, es progresar hacia unas condiciones más dignas y no enterarse, por ejemplo, de qué turnos van a hacer una semana con días de antelación. Por esto y por muchas otras razones la Asociación Unificada de Guardia Civil (AUGC) convocó para hoy 5 de junio una “gran movilización” en toda España, cuyo escenario será la Plaza Mayor de Madrid. Bajo el lema “AUGC en defensa de las libertades y derechos de los guardias civiles como ciudadanos”, la asociación estima que han asistido unos 3.000 guardias civiles de toda España para denunciar que siguen siendo “los funcionarios peor tratados de los cuerpos de seguridad pública”.

Retroceso de los derechos

Según Pedro Carmona, portavoz de la asociación convocante, se ha producido un “retroceso en los derechos de los guardias civiles desde el Gobierno”. “Reclamamos el cumplimiento íntegro del acuerdo de equiparación salarial, porque aún faltan las cláusulas 3ª y 8ª de acuerdo”. Estas son la incentivación de la reincorporación del personal de segunda actividad sin destino y reserva y la igualdad retributiva respecto a policías autonómicas.

Cuatro euros por noche

Según Carmona, también aprovecharán la concentración de hoy para reivindicar que no cuentan con una norma de productividad que reconozca el servicio en días festivos y horas nocturnas. “Pedimos un mejor reparto de la productividad, para que los servicios de noche y festivos se paguen mejor. Un guardia civil cobra neto por realizar una noche 4€”, recuerda el portavoz. Además, los guardias civiles son los únicos funcionarios policiales que carecen de una cadencia de servicios y son informados de los turnos de trabajo semanales con pocos días de antelación lo que imposibilita una conciliación familiar digna.