Medida de gracia

Un centenar de juristas firman un manifiesto en contra de los indultos por “razones de oportunidad política”

Advierten de los “graves riesgos” que supone para la defensa del Estado de Derecho y la separación de poderes en España

Los líderes del procés condenados para los que ahora se solicita el indulto
Los líderes del procés condenados para los que ahora se solicita el indultoDavid ZorrakinoEuropa Press

Un centenar de juristas han firmado un manifiesto, impulsado por la plataforma Consenso y regeneración,en contra de los indultos a los presos independentistas condenados en la causa del procés al considerar que representa “graves riesgos para la defensa del Estado de Derecho y la separación de poderes en España”. En el marco de la iniciativa, los firmantes critican al Gobierno de Pedro Sánchez por “utilizar los indultos por razones de oportunidad política”.

Según resaltan en el manifiesto, los políticos presos a los que el Gobierno quiere indultar no se han arrepentido y además, su intención es la de volverlo a hacer. Recuerdan que “así lo han manifestado en repetidas ocasiones”, junto con su convicción de que “la condena ha sido injusta y desproporcionada y de que son presos políticos, hasta el punto de que el indulto ha sido solicitado por terceros y no por los condenados”.

“Tensión” en el Poder judicial

Destacan que, a estas alturas del siglo XXI y en un asunto de tanta trascendencia “no parece aconsejable ni desde el punto de vista jurídico ni político forzar los límites de la institución y provocar una importante tensión con el Poder Judicial”, ya que, recuerdan, dichos indultos serán recurridos, previsiblemente, ante los tribunales de justicia. “Conviene no contraponer legitimidades y erosionar instituciones en un momento en que todas son necesarias”, subrayan.

“Privilegios políticos”

También, los juristas advierten de que “no parece” que la concesión de estos indultos “vaya a provocar ninguna mejora de la situación política existente en Cataluña”, donde la fractura, “se da entre independentistas y no independentistas”. Consideran que, sin embargo, se ahonda, además, en la convicción de muchos ciudadanos de que el Estado de Derecho no rige para todo el mundo por igual y de que los políticos gozan de un estatuto diferente y privilegiado frente a las leyes vigentes. También advierten de que los “ciudadanos catalanes no independentistas pueden sentirse, una vez más, abandonados por las instituciones” que deberían defender el respeto a las reglas del juego. “El deterioro de la convivencia y del respeto al Estado de Derecho en Cataluña en estos últimos años no parece que pueda superarse con más fracturas y con menos respeto al Estado de Derecho”.

Por todo ello, consideran que la búsqueda de una solución al conflicto entre catalanes debe pasar por “un respeto escrupuloso al Estado democrático de Derecho y a la Constitución de 1978, como el gran pacto político constitutivo de nuestra convivencia”. Asimismo, recuerdan que “las reglas del juego se pueden cambiar y mejorar, pero es esencial respetar los cauces establecidos y abrir un debate público lo más amplio posible que garantice la participación de todos”.