Renovación
La entrada de Espejel por el PP logra un tribunal algo más paritario
El partido de Pablo Casado “sacrificó” uno de los nombres que más sonaban, el catedrático Nicolás González Cuéllar, para introducir a una mujer en sus dos designaciones
La llegada al Tribunal Constitucional de la presidenta de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional, Concepción Espejel, ha sido sin duda una de las sorpresas de la renovación de las instituciones. La magistrada, llamada a ser la penalista de contrapeso de la izquierda en el alto tribunal, supone una nueva figura femenina para el pleno. Los nombres que se venían barajando por parte del PP eran Enrique Arnaldo Alcubilla -que sí ocupará su puesto en el Tribunal- y el catedrático de Derecho Procesal Nicolás González Guéllar. El partido de Pablo Casado ha “sacrificado” este último en favor de introducir a Espejel en sus dos designaciones.
El máximo intérprete de la Constitución está formado por doce magistrados, de los que hasta ahora solo dos eran mujeres. Ambas fueron nombradas por el Partido Socialista. La vicepresidenta Encarnación Roca que, si bien durante su mandato ha votado muchas veces del lado de los conservadores como en la sentencia sobre el primer estado de alarma, y la magistrada María Luisa Balaguer. Roca deja ahora la vicepresidencia y, por su plaza, entra otra mujer elegida por el PSOE: Inmaculada Montalbán, jueza del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
Junto a Roca salen otros tres hombres -Juan José González Rivas, Fernando Valdés y Andrés Ollero. El PP ha decidido inclinar ligeramente la balanza hacia la paridad nombrando a una mujer en lugar de a dos hombres, que venía siendo habitual en su proceder. De esta forma, el Tribunal pasa de tener dos juristas a tener tres. Es la primera vez, de hecho, que el partido de Casado introduce el componente femenino en el reparto que le toca en los más de cuarenta años de historia del órgano.
El alto tribunal, además, gana mucho en cuanto a perspectiva de género precisamente por el perfil de la jurista nombrada por el partido de Pedro Sánchez. Montalbán, procedente de lo Contencioso-Administrativo, fue presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género y ha llevado a cabo diversas investigaciones sobre la perspectiva de género y la interpretación de las normas en cuanto a esta. La magistrada habla abiertamente sobre la “violencia vicaria” en la que el agresor utiliza a los menores para conseguir hacer daño a la madre y ha escrito numerosos artículos sobre cómo proteger jurídicamente mejor a las mujeres en este aspecto.
Presidente y vicepresidente serán hombres
Lo que sí es prácticamente seguro es que la cúpula del órgano la ocuparán dos hombres. Hasta el garante de la Constitución solo ha sido presidido por una mujer desde 1980. María Emilia Casas, catedrática de Derecho de Trabajo y Seguridad Social, ingresó en el órgano en 1998 -siendo también el miembro más joven de la historia de la institución- y en 2004 se convirtió en la primera en presidirlo. Algo más de suerte ha habido con las vicepresidentas. Antes de Encarnación Roca ha habido dos: la jurista catedrática de Economía Gloria Begué, que fue la primera en ocupar este cargo entre 1986 y 1989; y Adela Asúa, elegida para el periodo entre 2013 y 2017.
Una vez se asiente el nuevo tribunal, los magistrados deberán votar quién lo va a dirigir en primera y en segunda instancia. La tradición contempla que deberían ser elegidos de entre los más antiguos, en cuyo caso todos son hombres. En este sentido, los nombres que cumplen esta premisa son Pedro González-Trevijano,Santiago Martínez-Vares, Antonio Narváez y Juan Antonio Xiol. Los tres primeros de ala conservadora y el segundo del progresista, por lo que, también la norma no escrita presupone que el presidente será conservador (porque la mayoría del tribunal lo es) y el ‘segundo’ progresista para equilibrar la balanza.
✕
Accede a tu cuenta para comentar