Temor

Alarma en la izquierda por la desmovilización y la abstención

En Podemos «preocupa» que la ayuda de los ministros no sea suficiente frente a las expectativas

La candidata de Por Andalucía a la presidencia de la Junta, Inmaculada Nieto, (4d), junto a los ministros Ione Belarra, (3d), Yolanda Díaz y Alberto Garzón
La candidata de Por Andalucía a la presidencia de la Junta, Inmaculada Nieto, (4d), junto a los ministros Ione Belarra, (3d), Yolanda Díaz y Alberto GarzónJoaquin CorcheroEuropa Press

El resultado no está escrito, pero hay evidencias de peso para que la izquierda acuda «preocupada» a las urnas este domingo. Así se sienten, de hecho, en el cuartel general morado, donde si bien tratan de no prestar importancia a las encuestas, lo cierto es que no ven rédito positivo que anime, todavía, a pensar en un giro en el tablero andaluz. Ningún sondeo da hoy posibilidades a una alternativa al PP de Juanma Moreno y ello sería una certificación que los partidos a la izquierda del PSOE ya han vivido en hasta tres ocasiones en el corto espacio de tiempo. De Madrid a Castilla y León, con la posibilidad de reedición en Andalucía. Y es que, hoy por hoy, la suma de las izquierdas es menor que la que obtuvieron en las últimas elecciones autonómicas.

Las encuestas otorgan entre seis y ocho escaños a Por Andalucía, con un máximo del 11,4 por ciento de los votos. A Adelante Andalucía, liderado por Teresa Rodríguez, entre tres y cuatro escaños y como mucho el 5,9% de los votos. Unido al PSOE, con entre 31 y 33 escaños de media, no llegan a los 45 diputados entre las fuerzas de izquierdas, ni a propiciar esa alternativa. A ello se suma, el desconocimiento de la candidata de Por Andalucía. Solo el 35,8% la conoce según la última encuesta del CIS publicada esta semana y solo un 4,2% la ve como futura presidenta. En su competición en la izquierda, Teresa Rodríguez es mucho más notable. El 69,3% la conoce y dentro de Unidas Podemos un 36,5% la ve como presidenta de Andalucía, por encima de la percepción que tienen sobre Inma Nieto. Solo un 27,1% de los votantes morados la ven en este puesto.

No solo en Podemos, sino que en Por Andalucía confiaban en llegar al votante de izquierdas, después de haber alcanzado al acuerdo entre Podemos, IU y Más País, partidos que en su día fueron aliados bajo el paraguas morado. De hecho, miembros de Por Andalucía, se ven hoy completamente implicados con la marca andaluza y sacan pecho de haber conseguido ponerse de acuerdo. Creen que la sociedad no les puede reprochar nada, al haber aparcado sus diferencias para aglutinar una marca que «sume». La propia candidata de Por Andalucía, Inma Nieto, aseguró esta semana que ve «más lejos» una mayoría absoluta de Moreno después del apoyo de los líderes nacionales y ministros del Gobierno, como la vicepresidenta Yolanda Díaz o la ministra Ione Belarra. Sin embargo, el positivismo que se vive en el sur no llega con la misma nitidez en Madrid, donde no se terminan de ver al electorado comprometido. En este sentido, los morados creen que este domingo puede perjudicarles la abstención, como ya ocurrió en 2018. En el reparto de culpas no se encuentra autocrítica por la batalla que supuso el registro de la coalición de Por Andalucía,creen que los andaluces están fijándose en los partidos que más propuestas ofrecen y ahí, se ven con ventaja. Pero si se remontan a la experiencia de otros comicios donde, aunque han visto como crecen en campaña, después no se traduce en escaños.

El hecho de que los ministros de Unidas Podemos se hayan volcado en la campaña electoral ha sido muy valorado por los integrantes de Por Andalucía. En Podemos, sin embargo, no ven suficiente las imágenes de unidad que se han repetido este fin de semana. Sin ir más lejos, ayer, Yolanda Díaz mitineó junto a Ione Belarra y el ministro Alberto Garzón, en apoyo a Inma Nieto y Juan Antonio Delgado. Pero esta movilización nacional, que nada tiene que ver con la implicación en la campaña en Castilla y León, no termina de ser un motivo de peso que haga despejar las dudas a los morados sobre el resultado electoral. Aunque, creen que «los últimos días de campaña son los más importantes», para un revulsivo.

Eso sí, creen, que en esta ocasión, si los resultados no son positivos, las miradas no se centrarán en ellos. Analizan que la implicación de la vicepresidenta en la negociación de la candidatura de unidad previa a su proceso de escucha, así como su presencia en campaña, hará que los focos se dirijan a ella. Para este escenario negativo, la líder gallega tratará de dar carpetazo a Andalucía, iniciando solo medio mes después su proyecto personal. Otro de los factores de la desmovilización que ven en Podemos se debe a la falta de «medidas valientes» por parte del Gobierno de coalición. Fue Pedro Sánchez quién le acusó de ser el factor de la desmovilización de la izquierda por dar publicidad a los desencuentros en el seno del Gobierno. Ante esto, en Podemos contestan rotundos. «Lo que desmoviliza a la izquierda es tener un gobierno que no sea valiente», sentencian.