Diplomacia

Albares: “Queremos que la presidencia sea, como la cumbre de la OTAN, un éxito de país”

El ministro de Exteriores asegura que el desafío climático e impacto de la guerra serán los retos de presidencia española de UE en el segundo semestre de 2023

El ministro de Exteriores, José Manuel Albares
El ministro de Exteriores, José Manuel AlbaresJuan Manuel Serrano ArceEuropa Press

El Gobierno tiene la mirada puesta en la presidencia rotatoria de la Unión Europea que ostentará entre julio y diciembre del próximo año. Un motivo más para que Pedro Sánchez agote la legislatura y no convoque elecciones hasta el final de 2023 o inicio de 2024. No en vano, una regla no escrita es que el estado miembro que ostente la presidencia nunca celebre elecciones durante ese periodo.

Por lo tanto, aunque las encuestas no auguren buenos resultados para los socialistas, la visibilidad de esta presidencia europea es un motivo para agotar el mandato y sacar rédito de la visibilidad de esta presidencia.

El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha inaugurado esta mañana un curso sobre la presidencia española de la UE en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), en Santander.

Según ha explicado, la presidencia española de la UE en 2023 tendrá como ejes principales la cohesión social, el impulso del europeísmo, el apoyo a la transición ecológica y la “mirada” hacia América Latina. No en vano, este inicio del curso político ha arrancado con la gira Latinoamericana de Pedro Sánchez, cuyo objetivo fue afianzar las relaciones con la nueva izquierda de estos países. De hecho, el jefe de la diplomacia española ha explicado que e la presidencia tendrá la “impronta” de América Latina, región que ha considerado como “la más eurocompatible” y ha celebrado que se impulsará una cumbre entre líderes europeos y latinoamericanos que, ha recordado, “no se celebra desde 2015″.

El titular de Asuntos Exteriores ha explicado que esa presidencia llegará en un “momento y contexto muy complejo y convulso” donde la guerra y sus consecuencias seguirá marcando la agenda internacional y europea. En ese contexto, será “necesario”, según el ministro, el “liderazgo fuerte europeísta y español” frente a “los modelos que no creen en Europa” y “el autoritarismo”. “Queremos que la presidencia sea, como la cumbre de la OTAN, un éxito de país”, ha añadido.

Transición ecológica

Sobre la transición ecológica, ha subrayado que España apostará, además de por la lucha contra el cambio climático, por reducir las “vulnerabilidades y las deficiencias” del sistema energético europeo para asegurar su “autonomía”. No en vano, en los últimos meses asistimos a un mercado energético tensionado como consecuencia de la guerra

En este sentido, ha considerado que los gasoductos Midcat y Barcelona-Livorno juegan un “papel fundamental”. “Es parte de la solución a ese problema y a la necesidad de un reordenamiento del mercado energético europeo”, ha añadido. Mañana el presidente Pedro Sánchez viajará a Alemania y se reunirá con Olaf Scholz con la crisis energética como fondo