Orden del día

Pleno «de retirada» en el CGPJ a la espera de la renovación

Vocales molestos con el secretario general por ofrecer a Marín la presidencia del Consejo tras la dimisión de Lesmes descartan in extremis llevar el asunto a la sesión

El Pleno del CGPJ no ha sido capaz de consensuar una respuesta unitaria para hacer frente a la acumulación de vacantes judiciales
El Pleno del CGPJ no ha sido capaz de consensuar una respuesta unitaria para hacer frente a la acumulación de vacantes judicialeslarazonCGPJ/EFE

El Pleno que celebrará hoy el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) –marcado por lo que puede ser su inminente renovación– no debatirá finalmente la actuación del secretario general de la institución, José Luis de Benito, en las horas previas al Pleno que, el pasado 13 de octubre, designó al vocal progresista Rafael Mozo como sustituto en funciones de Carlos Lesmes, cuando instó al magistrado del Tribunal Supremo (TS) Francisco Marín a asumir la presidencia del órgano de gobierno de los jueces sin esperar al resultado de ese Pleno.

Esa iniciativa no gustó a algunos vocales, que estaban dispuestos incluso a proponer la reprobación de su secretario general por ese comportamiento, al margen de instarle a apartarse de sus funciones en todo lo relativo a la tramitación del recurso que ha interpuesto ante el Tribunal Supremo (al igual que hizo el vocal Wenceslao Olea) contra la designación de Mozo.

Pero, finalmente, los vocales disconformes con ese comportamiento desistieron ayer de poner sobre la mesa esa cuestión, asumiendo que se trata de un Pleno «de retirada» en plena cuenta atrás de un renovación pendiente desde hace casi cuatro años.

Será, por tanto, una sesión «vacía de contenido» –admiten fuentes de la institución–, pues aunque sí figura en el orden del día la renovación de los jueces del Tribunal Constitucional (TC), cualquier paso en ese sentido –con el Gobierno y el PP negociando la renovación del Consejo– «no tiene ni ningún sentido». Fue el propio presidente interino quien incorporó ese punto al orden del día, más por responsabilidad institucional que porque exista una posibilidad real de desbloquear esa elección, pendiente desde el pasado mes de junio.

«Ya no tienen ningún sentido que nosotros nombremos a los magistrados del Tribunal Constitucional», señalan esas mismas fuentes. «Eso ya lo tendrá que hacer el Consejo que venga», añaden asumiendo que puede tratarse del último Pleno del actual CGPJ (al margen del que habrá que realizar, quizá la próxima semana, para aprobar el acta de la sesión de mañana antes de entregar el testigo al nuevo Consejo siempre y cuando las conversaciones del Gobierno y el PP culminen esta vez con éxito). «Lo normal es que la próxima Comisión Permanente sea ya de cierre», explican.

Es precisamente esa sensación de último día de curso la que ha orillado la reprobación del secretario general que pretendían algunos vocales, que entendían que el Pleno debía «recriminarle una conducta que se considere impropia» y «desleal», «tanto por el objetivo que perseguía, desactivar un punto del orden del día ofreciendo la presidencia a Marín, como por las formas, al haberlo hecho de manera clandestina».

Este grupo de vocales pretendía incluso que De Benito se apartase provisionalmente de sus funciones porque, de lo contrario, consideraban que «estaría incurriendo en un conflicto de intereses al intervenir en la tramitación de un recurso instado por él mismo». «Tiene la obligación legal de hacerlo y, si la incumple, se le pueden pedir responsabilidades disciplinarias», defendía uno de ellos ayer mismo.

Como informó LA RAZÓN, la decisión de José Luis de Benito de remitir el pasado 12 de octubre a Marín un correo electrónico, instándole a que asumiera la Presidencia del CGPJ, generó un notable malestar entre algunos vocales. En esa misiva, el secretario general apremiaba a Marín a presidir el Pleno que se celebraba al día siguiente precisamente para dirimir cómo se iba a articular la sucesión de Lesmes, y que concluyó con la designación de Mozo con un solo voto en contra.

De Benito hizo suyo el informe que presentó Lesmes al Pleno a antes de su renuncia –que descartaba una bicefalia al frente del Supremo y del CGPJ y señalaba al magistrado del alto tribunal Francisco Marín como su sustituto al frente de ambas instituciones– y pidió a Marín que asumiera también la presidencia del Consejo «sin solución de continuidad», según las fuentes consultadas. Y hacerlo ya en la Comisión Permanente y en el Pleno convocados para el 13 de octubre.

Lesmes había puesto ese informe del Gabinete Técnico en conocimiento del Pleno, cuestionó que ese dictamen avalara una sucesión automática sin intervención alguna de los vocales, que finalmente terminaron dejando la presidencia interina en manos del vocal de más edad, Rafael Mozo.