Tribunales
Caso Koldo: Jessica confiesa que buscó el piso cerca de Ferraz para tener intimidad con Ábalos
La joven deslizó que el exministro medió para que la contrataran en Ineco, aunque no acudió en los dos años de contrato
Jessica Rodríguez ha marcado distancias con la trama Koldo en su declaración este jueves en el Tribunal Supremo. En su comparecencia, en la que ha roto a llorar en varias ocasiones, ha asegurado que desconocía cómo se pagó la vivienda de lujo en la que residió en Plaza de España y ha dicho que se independizó porque así se lo sugirió su entonces pareja José Luis Ábalos. "Elegí ese piso porque estaba cerca de Ferraz y de mi universidad", ha asegurado.
La joven, que estaba citada como testigo en el Tribunal Supremo, ha echado balones fuera en todos los aspectos que le vinculan con el caso Koldo. En relación con la vivienda que la trama le pagó en los años de pandemia, Jessica ha asegurado que no tuvo conocimiento exacto de quien abonó las mensualidades. Según su relato, compartía piso con unas compañeras, pero se independizó por sugerencia del exministro socialista y para tener más intimidad en sus encuentros.
"Yo le dije qué pisos me gustaban y luego el señor Koldo se puso en contacto conmigo", aseguró. En la primera cita para ver la residencia, ubicada en el centro de Madrid, acudió Alberto Escolano, mano derecha de Víctor de Aldama y quien costeó el alquiler de su estancia que superó los 80.000 euros. Preguntada por si sabía que era este presunto testaferro el que pagaba los 2.700 euros mensuales de alquiler, Jessica dijo que lo desconocía. No obstante, a renglón seguido, dijo que se «imaginaba" que podría ser Ábalos en coordinación con su entonces asesor, Koldo García.
"Koldo siempre le hacía todo a Ábalos"
Al respecto, y preguntada por si envió mensajes a Koldo preguntándole por las mensualidades que abonaba Escolano, Jessica ha dicho que ella "siempre hablaba con Alberto". No obstante, ha insistido en que no supo de dónde salió el dinero que, según la Guardia Civil, podría venir de las actividades ilícitas de esta presunta organización criminal. También ha restado importancia por el hecho de que se quedara en la casa hasta 2022, pese a haber roto la relación dos años antes. Según ha dicho, lo entendió como un gesto por la decepción amorosa.
La testigo, que se ha derrumbado en varias ocasiones durante su testifical, ha asegurado que Koldo García hacía todas las gestiones al exministro. "Hasta ir a por tabaco". Ante el juez ha expuesto que fueron pareja entre octubre de 2018 y noviembre de 2019, momento en que la relación se rompe porque el entonces ministro no quería dejar a su pareja por el cargo público que ocupaba. En ese sentido, ha cerrado filas con el exministro de Transportes asegurando que, efectivamente, acudieron a viajes oficiales juntos (entre quince y veinte, ha dicho) y que se los pagó él.
Otro de los puntos que el magistrado Puente ha puesto sobre la mesa es el relativo a su empleo en dos empresas públicas que dependían del Ministerio de Transportes. Aunque los imputados han defendido en sede judicial que las contrataciones corrieron a cargo del hermano de Koldo García, la joven ha asegurado que fue Ábalos quien le abrió la puerta en 2019. Según dijo
Dos años sin pisar el trabajo
Jessica le mandó el currículum y al poco tiempo le contactaron. Preguntada por si le llamaron a raíz de una gestión de Ábalos, la testigo deslizó que podría ser así porque no entregó su currículum en ningún ente. Pese a ello, le contactaron desde Ineco para hacer la entrevista "con un señor" cuyo nombre no recordaba. Según su relato, en dos años ni pisó la empresa pública ni desempeñó trabajo alguno. Solo acudió el primer día para recoger un portátil.
De su relato se desprende que le contrató Joseba García porque éste, a su vez, tenía una subcontrata con la mercantil dependiente del Ministerio de Transportes. Confirmando lo reflejado en los mensajes que obran en el sumario, Jessica dijo que cobró el salario mínimo interprofesional pero que no puso un pie en este trabajo durante todo el tiempo que estuvo contratada. "¿Usted no hizo nada en dos años?", le preguntó el instructor, a lo que ella respondió: "No". Lo mismo ocurrió los seis meses que estuvo en Tragsatec.
El fiscal jefe Anticorrupción, Alejandro Luzón, se interesó especialmente por el mensaje que le escribió a Ábalos en 2021, cuando ya no eran pareja, para comunicarle que había rescindido su contrato en la empresa pública en la que la trama le habría enchufado. "¿Le escribió con la idea de conseguir otro?", le preguntó, a lo que ella respondió con una negativa. "Solamente se lo comunicó para que supiera que se terminaba", dijo. Al término de su testifical, el juez le permitió abandonar las dependencias judiciales por una puerta trasera para evitar la prensa que le esperaba en la salida principal.