"El delegado del Gobierno en Madrid es un humillador de las víctimas"

El presidente de Dignidad y Justicia, Daniel Portero, ha pedido la “dimisión urgente” del delegado del Gobierno en Madrid, Francisco Martín, tras las declaraciones en las que éste ha defendido a Bildu por encima del resto de ciudadanos. “No puede seguir ni un minuto más en el cargo un defensor del partido de ETA, es un humillador de víctimas del terrorismo”, ha dicho el presidente de Dignidad y Justicia, que ha recordado a Martín que quienes sí que han ayudado a sostener el nivel moral de nuestro Estado de Derecho son esas víctimas a las que él está deshonrando con sus palabras de ensalzamiento a Bildu.

“Han llevado a asesinos en sus listas y usted les defiende solo porque le han permitido sentarse en el sillón en el que está sentado”, le ha recriminado Portero, que considera que el Gobierno socialista está poniéndose con claridad del lado de los verdugos a cambio de un puñado de votos, como se ha demostrado no solo en esta ocasión, sino también en otros episodios como el acercamiento de presos o el paso atrás que dio la Fiscalía cuando dijo que no quería acusar en el caso Miguel Ángel Blanco a los jefes de ETA imputados en la Audiencia Nacional.

“Bildu está condicionando la agenda de España y las declaraciones de Martín solo corroboran esta realidad”, ha señalado Portero, que también critica que otra Delegación del Gobierno, esta vez la del País Vasco, por segundo año consecutivo haya organizado unas jornadas formativas dirigidas al personal de la Administración General del Estado en esa comunidad autónoma que impartirá la que fue portavoz de la organización ilegalizada Gestoras pro Amnistía, Aitziber Bañuelos.

“La Audiencia Nacional declaró que esa estructura dependía directamente de ETA”, recuerda Portero, que ve en este movimiento “un paso más hacia el blanqueamiento de quienes han apoyado y vivido de la banda terrorista durante décadas; entre ellos, los propios asesinos que han acabado con la vida de más de 800 personas”. “Se trata de una estrategia teledirigida por Pedro Sánchez en la que los delegados del Gobierno no son más que meros ejecutores; Sánchez ha dado orden de blanquear a Bildu”, entiende el presidente de Dignidad y Justicia.