
Interior
Incidentes y exhibicionismo en el módulo de un hospital ante la falta de protocolo policial
Los policías nacionales solicitan que se establezca un protocolo de actuación ante los incidentes que se producen en el Hospital de Ávila

La seguridad del módulo para presos del Hospital de Ávila está sobrepasando la paciencia de los agentes de la Policía Nacional que vigilan a estos internos. La falta de un protocolo de actuación unida al incremento de los incidentes ha provocado que los funcionarios hayan dicho basta. "Uno de estos sujetos exhibió sus partes y se puso a mear a la policía y a las enfermeras", relatan fuentes policiales a LA RAZÓN.
Este problema busca una solución ante la impaciencia de los agentes, que ven como la situación que se está generando es insostenible. "Este módulo de seguridad que está ubicado en el interior del Hospital Nuestra Señora de Sonsoles. Es donde se lleva a los internos de la cárcel cuando tienen algún problema médico", explica a LA RAZÓN Juan Luis Cordera, secretario Provincial de Jupol en Ávila.
El riesgo de los policías
Los incidentes se han multiplicado en las últimas semanas. El motivo de este incremento es que de forma habitual este espacio estaba reservado para las internas de la cárcel de Brieva, que es únicamente de mujeres y tiene una "peligrosidad mínima", según detalla el representante del sindicato policial.

No obstante, en los últimos tiempos están trasladando a este hospital a presos del Centro Penitenciario de Topas de Salamanca. "Ahí, sí es un riesgo grave y el problema es que no tenemos ningún protocolo de actuación en Ávila", remarca.
Las órdenes de intervención dependen del criterio de los jefes. En la actualidad, se están enviando un funcionario y da lo mismo que sea hombre o mujer. También da igual que sea interno o presa. El problema está aflorando con incidentes de todo tipo.
La violencia de un preso
Hace unos meses, un hombre exhibió su miembro y se orinó encima de una policía y las enfermeras que le atendían. La semana pasada se produjo otro incidente. Un policía tuvo que reducir a otro preso por los suelos con la ayuda de los enfermeros y celadores. "No se está preparado para este tipo de peligrosidad", lamentan desde Jupol.

El sindicato solicita de forma reiterada que se establezca un protocolo de actuación que contenga cómo deben proceder y cuántos compañeros tienen que ir. En otros puntos de España como Valladolid sí que se llevan a cabo estas órdenes.
Precisamente, en esta región se detalla que deben ir dos policías juntos. Esta petición se ha realizado de forma reiterada al comisario provincial de Ávila en varias reuniones. La excusa que ponen es que no hay personal suficiente. Ya hay agentes femeninas que se han negado a ir sola. "Es lo de siempre, hasta que ocurra una desgracia no se pone medios", concluye.
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