Presiones

La presidenta del PP extremeño, María Guardiola: "Iremos a elecciones si hay que ir"

La formación que lidera Santiago Abascal antepuso "sus ansias de poder y su soberbia" al cambio, según ha criticado la dirigente popular

"Iremos a elecciones, si hay que ir, y volveremos a demostrarle a los extremeños que tenemos palabra, y que Extremadura está por encima de cualquier cosa". Esta es la reacción de la presidenta del PP en Extremadura, María Guardiola, tras perder la cota de poder en la Asamblea esta mañana. Y es que la falta de acuerdo entre PP y Vox ha provocado que la socialista Blanca Martín se convierta en la nueva presidenta de la Asamblea regional. Un acuerdo que no llegó porque la formación que lidera Santiago Abascal, antepuso "las ansias de poder y esa soberbia al cambio".

En este sentido, Guardiola ha recordado que es cuestión de "sentido de Estado", tal y como el PP ha demostrado en ciudades como Vitoria o Barcelona, donde ha dejado gobernar al PSOE "sin pedir nada a cambio" para evitar el gobierno de independentistas o Bildu. Así, ha señalado también que le "hubiera encantado" que el líder socialista, Guillermo Fernández Vara, "hubiera hecho ese último servicio a su tierra y hubiera facilitado la gobernabilidad" en una tierra que, según ha dicho, "claramente en las urnas ha pedido cambio".

La presidenta del PP de Extremadura ha lamentado que Vox "haya antepuesto sus ansias de poder y esa soberbia al cambio", una actitud con lo que "parece que obliga a ir a elecciones" en Extremadura. Una situación a la que no quería llegar y por la que, según asevera, intentó "por todos los medios" y "hasta última hora" llegar a un acuerdo con Vox, algo que no ha sido posible.

Y llegados a este punto, considera que lo que está en juego ahora mismo no es el poder sino "la dignidad" de Extremadura. "Yo no puedo dejar entrar en el gobierno a aquellos que niegan la violencia machista", así como "a quienes colocan una lona y tiran a la papelera la bandera LGTBI", ha reafirmado la presidenta del PP de Extremadura, quien ha aseverado que cree "en una Extremadura inclusiva, moderna, respetuosa y solidaria", ha reafirmado.

"No" a la política de sillones

La dirigente del PP extremeño ha considerado que "la política no debería servir para ocupar sillones, sino para mejorar la vida de los demás", tras lo que ha reafirmado que su "único objetivo" ha sido "cambiar" Extremadura para mejorar la vida de los ciudadanos.

María Guardiola ha reafirmado que es "una servidora pública con principios, con ideas y con compromiso", tras lo que asegurado que "una cosa es negociar, y otra muy distinta es mercadear con la ilusión de Extremadura". Hay que recordar que en las elecciones del pasado 28 de mayo, el PP obtuvo 28 diputados (38,8% de los votos), frente a los 5 de Vox (8,12%). Por este motivo, y "con todo el respeto a los votantes" de Vox, la presidenta del PP extremeño ha argumentado que "el rol adecuado a sus resultados es apoyar el PP y no al revés", ante lo que ha advertido que no va "a firmar un acuerdo de gobierno ni un pacto asimétrico y lleno de condiciones".

"Yo no voy a regalar consejerías ni voy a entrar en batallas culturales que están superadas, porque se trata de solucionar el futuro de los extremeños", ha defendido María Guardiola, quien ha considerado que "el camino más fácil hubiera sido ceder y ser presidenta a cualquier precio y traicionar a mi tierra y lo que prometí en campaña", pero "esa no soy yo", ha reafirmado.