Entrevista

Sánchez carga contra el PP por el bloqueo del CGPJ: "Es un caso de 'lawfare'"

Acusa a los populares de tener de "rehén" al CGPJ y desvela que el verificador con ERC será distinto del de Junts. Evita responder sobre si Puigdemont debe rendir cuentas ante la Justicia

Este lunes se cumplen cinco años de bloqueo entre los grandes partidos para consensuar la renovación de la cúpula del Consejo General del Poder Judicial, lo cual supone que el actual Consejo haya duplicado ya su mandato. El camino, en la nueva legislatura, sigue siendo el mismo y no hay mimbres para encontrar un ápice de optimismo para el punto de encuentro entre PSOE y PP.

El presidente del Gobierno ha acusado al PP de practicar "lawfare" por, a su juicio, negarse a renovar el Poder Judicial. En una entrevista en la Cadena Ser, Pedro Sánchez ha asegurado que "no hay caso más paradigmático de lawfare en España que este secuestro en el que tiene sumido el PP al Poder Judicial". Según ha asegurado, Sánchez quiere volver a hablar con el PP para intentar la renovación del CGPJ. A su juicio, en España "no hay un problema de separación de poderes", sino que el "principal partido de la oposición tiene de rehén al Poder Judicial". Criticó que las consecuencias son "terribles" y es un caso "paradigmático de lawfare, de politización de la política". Además, lo vinculó directamente al hecho de que los cinco años del órgano caduco coincidan con su mandato. "Cinco años de gobierno presidido por el malvado Sánchez, cinco años de bloqueo. No hace falta hacer un croquis", contestó.

Sánchez ha insistido en la idea de que lo que hay que hacer es "exigir al PP que cumpla con la Constitución" y que "podamos desbloquear esta situación". Según el presidente del Gobierno el bloqueo del órgano de los Jueces tiene como "raíz" la no asunción del resultado electoral y el cuestionamiento de la "legitimidad" del Ejecutivo por parte del bloque de la derecha.

Precisamente, dos días después de la reunión en Ginebra entre PSOE y Junts donde acordaron la planificación de trabajo y el nombre del verificador, el presidente del Gobierno ha defendido la necesidad de esas reuniones y también que se celebren en Extranjero por "uno de los actores" y, además de defender la figura del verificador, ha reconocido que no será la misma figura en las conversaciones con los republicanos.

El presidente del Gobierno asegura que "con Junts se está negociando lo que está publicado. Hemos hecho públicos todos los acuerdos. La de Ginebra es la primera reunión de otros muchos El objetivo es restaurar la convivencia en Cataluña", ha dicho. "Me llama la atención los golpes en el pecho de la derecha. En otros contextos, yo recuerdo a Aznar reunirse en Suiza con en entorno de ETA", ha afirmado.

Sobre los acuerdos con los independentistas para que descanse su gobernabilidad, ha asegurado que la amnistía y los pactos con ERC y Junts estarán dentro de la Constitución "y a partir de ahí son mesas entre los partidos políticos sobre lo ya escrito". Ha defendido que la reunión ha sido en Ginebra porque "algunos actores no viven en España, viven en Bruselas" y ha defendido que la amnistía supone poner el contador "a cero", pero no el de la memoria. "Ya lo dije con los indultos, era llevar a ese punto, antes de 2017, cuando nos separamos. Es poner el contador a cero, pero no es poner la memoria a cero. Todos debemos de extraer conclusiones. Me llama la atención, en negativo, lo que estamos viendo en el PP, que después de todo vuelve a utilizar la cuestión catalana como un elemento de confrontación. Yo abogo por la normalización y la superación de los conflictos. Amnistía significa poner el contador a cero no la memoria a cero. Lo importante es la intención de excepción a la norma".

Lo que sí ha evitado es responder si Puigdemont debe o no responder ante la Justicia. "Es un debate legítimo", ha reconocido, pero en vez de contestar ha puesto el acento en que "lo más relevante" es que "entre todos logremos superar lo que pasó en 2017".