Fuerzas de Seguridad

El TSJM anula una adjudicación de plazas y obliga a la Guardia Civil a repetirlas

La sentencia obliga a que la resolución esté motivada y explique los motivos de su decisión

Agente de la Guardia Civil
Agente de la Guardia CivilArchivo

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha dictado sentencia en la que se estimó el recurso interpuesto por un guardia civil por la que se anula la resolución que resuelve una convocatoria de plazas, debiendo retrotraerse el concurso de traslado al momento inmediatamente anterior a sus resoluciones finales, a fin de que la Administración razone su resolución.

La defensa jurídica del agente, perteneciente a la APROGC, hizo referencia en primer lugar a la obligación de motivación de los actos administrativos. La exigencia de motivación de las actuaciones administrativas está directamente relacionada con los principios de un Estado de derecho (art. 1.1 de la CE) y con el carácter vinculante que para las Administraciones publicas tiene la ley, a cuyo imperio están sometidas en el ejercicio de sus potestades (arts. 103.1 de la CE y 3.1 de la Ley 40/2015, de Régimen Jurídico del Sector Público).

De esta manera, todas las decisiones administrativas están sujetas a la exigencia de motivación (art. 88.3 de la LPAC). El deber de motivar, nos dice la STS, rec. 451/2001, de 3 de diciembre, “Es un derecho subjetivo público del interesado no solo en el ámbito sancionador sino en todos los sectores de la actuación administrativa: la Administración ha de dar siempre y en todo caso, razón de sus actos, incluso en el ámbito de su potestad discrecional, cuyos elementos reglados (competencia, adecuación a los fines que la legitiman, etcétera), cuyos presupuestos, y cuya sujeción a los principios generales son aspectos o facetas que son siempre controlables”.

La abogada encargada del asunto, Vanessa Ruiz, del despacho de abogados Guardian Legal, asesoría jurídica de APROGC, presentó recurso al considerar que la Administración debía motivar y argumentar su resolución.

El Tribunal le dio traslado al Abogado del Estado, el cual insto la desestimación, insistiendo en que la vacante que solicitaba el recurrente estaba bloqueada y centrando la cuestión controvertida en analizar si era conforme a Derecho la resolución recurrida.

Finalmente, el TSJM dictó sentencia en la que se estimó la petición realizada por el agente, por la que se anula la resolución de la Administración que resuelve la convocatoria de plazas, debiendo retrotraerse el concurso de traslado al momento inmediatamente anterior a sus resoluciones finales, a fin de que la Administración razone su resolución, además de condenar en costas a la Administración.

Vanessa Ruiz ha señalado que “la Guardia Civil debe darse cuenta que debe de motivar y argumentar sus resoluciones, ya que es cada vez más frecuente que los tribunales den la razón a los guardias civiles que solicitan no sólo que se les conteste a sus peticiones, sino que además se le dé una respuesta razonada de lo que solicitan".